DECISIÓN. APLICACIÓN. RESULTADO *

   Es imprescindible prescindir de las incertidumbres para conocer la verdad. Y las incertidumbres sólo desaparecen cuando uno sabe quién es realmente. Por eso, si ahora te ves sumido en confusión y la desconfianza que el ego genera, has de aceptar la responsabilidad de ello y decidir en favor de la claridad y el Amor para, en la aplicación constante de deshacerte del apego a cualquier tipo de resentimiento, duda o ira, poder obtener el resultado del Despertar de la Consciencia.

  Sopesar pensamientos no es de ayuda pues focaliza la atención en las diferencias que los definen y angustia el ánimo. Tienes el poder de estar en paz. Deja que la paz alumbre tu camino. El final del juicio sucede en la luz clara de la verdad que no conoce desequilibrios y rompe, para siempre, las cadenas de toda esclavitud y mundana servidumbre. No malgastes el poder de estar en paz oscilando con las dudas 'acerca de' y decide, con rotunda convicción, en favor de la serenidad del espíritu. Reconoce que todo pensamiento que tenga un contrario, sin remedio, se contradice a sí mismo al fabricar un opuesto que lo niega, porque -a todas luces- cualquier idea segmentadora, en su parcialidad, necesariamente es falsa. Por eso, cualquier pequeña irritación ha perturbado igualmente la paz mental como un descomunal enfado.

   No busques y rebusques en tu mente esperando encontrar un pensamiento, llamémoslo X, que en combinación con otro, llamémoslo Y, vaya a traerte felicidad; porque no existe una fórmula secreta que pueda darte algo semejante a: X + Y = felicidad. No es una cuestión de cantidad, sino de consciencia. Las cantidades igual que pueden sumarse, también pueden restarse, multiplicarse o dividirse, abriendo, de par en par, las puertas a la llegada de las incertezas. Es todo mucho más sencillo y fácil de lo que imaginas. Simplemente: felicidad = felicidad, y, esta sencillez vale para todo; paz = paz, vida = vida, eternidad = eternidad, etc., sin necesidad de encontrar alambicadas formulaciones conceptuales para alcanzar un resultado esencial y permanente. Ahora, tan sólo, recuerda que tienes el poder de decidir. Sean cual sean las circunstancias, decide y aplica ser feliz.

   No te demores más. Es imprescindible la aplicación de las decisiones para que lo fundamental suceda, para que el resultado sea pleno. No te quedes a medias o seguirás en la ignorancia que cree saber (la peor de las ignorancias). Despierta del sueño del ego no yendo tras sus ilusiones. Al igual que si uno ha decidido aprender a conducir un auto, sí o sí, ha de llevar a cabo, por sí mismo, todos lo manejos que señala el manual de aprendizaje sobre el auto en cuestión y no esquivar la práctica quedándose, insensatamente, satisfecho con saberse de memoria el manual para, después, querer ser ya un experto profesor de autoescuela.

   Sin la acción plena todo queda en nada por muchas justificaciones que se elaboren, incluso con aquellas preparadas con destacado ingenio... porque uno podría engañar al mundo entero pero, en el fondo, jamás a sí mismo.

   Desecha la inestable superficialidad de los juicios perceptivos y sus migajas de pretencioso alimento, conseguido a fuerza de querer ocupar un lugar cómodo o prestigioso en el mundo. Y recuerda, y aplica vigorosamente, las palabras del Maestro: 'no sólo de pan vive el hombre' y 'mi Reino no es de este mundo'. No se encuentra la verdad en los juicios o las comparaciones que quieren aferrarte a un mundo pasajero, sino estando plenamente consciente de la propia consciencia. Decide y lleva acabo la acción de ser consciente de ser consciente y, con sencillez, la plenitud de la consciencia brillará desde lo sustancial, inabarcable e indescriptible, desde el espíritu inmortal que en lo nucleico eres.

    ¡Confía en lo esencial! ¡Sí, confía! ¡Es ahora!

   Celebra tus nupcias con el Amor. ¡Que los opuestos no se peleen más! ¡Que tu mente dividida vuelva a ser una en el Amor! Ten fe. Decídelo y llévalo a la acción... Amor = Amor... Congruencia total... Resultado inequívoco... nada quedará sin ser devuelto al Espíritu, porque sólo Dios y Su Creación, que en Él es Una, tendrá significado. Y todo lo Bueno será preservado en Dios, desde Dios, por Dios y para Dios... Plenitud de plenitudes... Bendición de bendiciones... Dicha infinita... Pureza esplendorosa... Eternidad Bienaventurada.

KHAAM-EL

El Amor siempre es Uno
y decidir permanecer en Él 
aplicando Su generoso desprendimiento de Sí
trae el bienaventurado resultado de la Plenitud.