martes, 17 de abril de 2018

LO INSEPARABLE

   En esencia y en verdad no hay inocencia realmente mancillada o perdida a causa de lo juicios  egoicos porque lo pensado o experimentado en un sueño carece de significado, y el ego y su mundo no es más que una ilusión de vida. así que rechaza todo temor. no seas tibio ni pusilánime. Nada hay en las relaciones formal/temporales que sea ciertamente valioso. Suelta cualquier deseo que te ate al mundo, y el miedo, que con desespero parecía atenazarte, cesará. Esa cambiante ansia de arbitraria compulsión que creyendo en separaciones y opuestos (riqueza o pobreza, belleza o fealdad, mañana y ayer, ciencias o letras, bien y mal, inteligencia o cortedad, religiones o ateísmos, salud y enfermedad...) parecía desgarrarte será sanada por la indisoluble unicidad del Espíritu... no hay fracción entre tú y el prójimo, o entre tú y el mundo, ni por supuesto entre tú y tú... 

   Aquieta tu mente no significando juicios y en la calma que trasciende toda agitación conocerás sin ningún género de dudas que cualquier personal combate aún ganándolo te pierde, te divide, te hiere, te duele, te derrota... te mata, convirtiéndote desde niño en una vieja nada peleando por algo. Vuelve a la paz, a la paz interior que todo lo abarca. Recuerda como lo constante, espiritual y eterno siempre es nuevo, y lo cambiante, corporal y temporal es irremediablemente antiguo en su tediosa repetición.

   ¡Despierta! ¡Despierta! Es ahora, es aquí... una simple y sencilla decisión a favor de lo santo, a favor de la confianza total en la providente guía del Amor. Reconoce que justificar contradicciones niega la Verdad y te mantiene sujeto a fantasías, creencias, sesgos u opiniones, que en su arrogancia pretenden saber lo que no pueden saber. Sé humilde, no intentes caminar con los nebulosos recuerdos del ego o desviarás tu camino hacia la angustia y el llanto. Estate, pues, vigilante y no te engañes con nieblas que fingen luminosidad ni con vanos deleites que anestesian y esconden profundos pesares... Despertar al Espíritu es darse cuenta que no había nadie en especial que tuviera o necesitará despertar, ni tampoco unos pensamientos exclusivos que nos configuraran realmente. Lo mensurable y definible únicamente es una pasajera ensoñación tomada por un tiempo en el tiempo como real.

   Ve más allá de las ilusiones, mira allende las apariencias... la percepción casi siempre, por no decir siempre, engaña. No te identifiques con los juicios o con los sentires de un yo ilusorio (el ego) o creerás experimentar lo que nunca fue real, lo que jamás será real; ahonda allende sus fugaces seducciones, sigue la paz, la honda paz de espíritu. Sigue, con vigorosa determinación, a esa silenciosa certeza interior que no necesita conceptos... hasta la incuestionable vivencia que siente, por encima de todo particular sentir, la eterna unicidad esencial de la Vida. ¡Sí, despierta! Que nada te arredre, no huyas ni te escondas, no te sometas ni ataques. Bendice todo obstáculo con la claridad liberadora de la acción desprovista de miedo, codicia, rencor u orgullo. La felicidad de lo Inseparable, de lo puro, bienaventurado e indisoluble, se encuentra a tu alcance, al alcance de todos, ahora, siempre ahora, abandonando el apego al ego y sus vanas historias.  Namaste.

KHAAM-EL



El Amor es pleno inseparable
y perderlo una angustia que el ego insinúa...
¡Despierta!
Deja de soñar que sueñas
y despertarás del sueño que sueña que despierta
soñando un soñador ilusorio.




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