ATIENDE...

ATIENDE...

Al igual que los manantiales menguan y se agotan con las sequías
la vida se torna árida y estéril si no se la riega con el eterno Amor
que desde lo más hondo del corazón se derrama.

No le pongas diques al tránsito de los días
ni te escondas en las sombras de la noche...
contempla con Amor todo desamor
y reconocerás que tiembla de miedo la mente egoica
ante la fugacidad y fragilidad de las formas

al no poder concebir su propia evanescencia.

No te distraigas con vanas banalidades
y aquiétate en lo esencial siempre
e intuirás lo evidente...
Atónita contempla la lógica de lo personal
su ilógico cambio incontenible,
su ciego mirar impermanente...

Todo varía inexorable tras la brevedad de un segundo.

un sabor se disuelve al poco y un gorrión vuela lejos,

los colores pierden intensidad con el girar del mundo

y una fragancia queda pronto tan sólo en el recuerdo.

En la caducidad geométrica de cualquier figura

persiste en su apariencia la inestabilidad de los tránsitos.

El ahora, aquí, pleno y consistente en su esencia,

es el perenne reino del Ser que no muta ni perece;

mientras el discursivo tiempo cuenta una historia de finales

que reinician, con otros rostros, los mismos ciclos de siempre.

Desecha cualquier ansia de diferenciar lo indiferenciado.

Ni angustia ni desesperación, ni cólera ni soberbia,

tampoco euforia ni placer; ni siquiera la frustración o el llanto

pueden agitar la suprema paz de la Consciencia consciente.

Escucha, pues, hijo del devenir

la inconmensurable profundidad que te alienta...

escúchala con reverente silencio.

te mostrará en plenitud tu plenitud,

la plenitud esencial de todo, de todos,

ofreciéndote lo incondicional para que lo expreses,

para que lo compartas y lo extiendas,

para que dándolo con constancia lo tengas siempre...

y seas, sin vanas distracciones, quien ya eres:

Vida indivisa de la Divina Unicidad.

Escucha la Voz del Alma despertarte del sueño del ego.
Encuentra en ella tu destino universal e inefable
más allá de cualquier acción de interesado resultado.

Despréndete, definitivamente,
de los hipnóticos ropajes impermanentes

y permanece feliz en comunión con Todo Lo Que ES.

KHAAM-EL

Escucha la voz del alma 
y ve hacia ese encuentro interior con la infinitud del Ser.

Bendiciones.