jueves, 28 de febrero de 2019

SENDA DE PLENITUD Y VIDA

   No hay luz que no encienda la tiniebla más oscura, por lo que no hay luz que no muestre la senda a seguir. No temas. Por muy solo y desamparado que te sientas; por muy crueles que sean las circunstancias que puedan rodearte, incluso sintiéndote lacerado, humillado, enfermo, hostigado, burlado, estafado, o confuso y exhausto, y, apesadumbrado experimentes que una cruz enorme te aplasta, la Providencia Divina espera fiel un humilde y honesto gesto de fe (recuerda a Cristo en la cruz que -habiendo dado su vida por Amor- su perfecta fe le condujo a la Resurrección, o a Buda que, dispuesto a morir en su autoindagación por la Verdad, alcanzó la Iluminación)... entrégate totalmente y encomienda tu espíritu, tu mente, tu cuerpo, y todo aquello que creas conforma tu vida, a la Divina Unicidad y, Ella, te mostrará el bienaventurado Camino de Plenitud y Vida.

   La Providencia Divina es generosa y paciente para con todos. Nada se escapa a su compasiva mirada y coloca cuidadosamente los signos que redireccionan los ciegos y errabundos pasos dados al impulso de los deseos personales, surgidos del orgulloso, limitado e ignorante egoísmo, que, despiadadamente, dirigían a los más oscuros abismos del dolor y la desesperación, del enojo, la insatisfacción y la frustración, de la enfermedad, la soledad y la muerte. Mas, en su magnificente auspicio, la Providencia no excluye a nadie de su indicación certera hacia la dicha, el amor y la unicidad esencialmente definitiva; pues, la Providencia Divina, es como la luz de un faro en medio de las tinieblas; ella no falla, es la llave maestra que nos desencadena de todos los infaustos destinos, para salvarnos con infinita misericordia. Si la seguimos nos lleva a buen puerto y si no la seguimos es decisión de uno. Ella sigue siempre presente, iluminando, guiando constante, bendiciendo, invitando. Luego, nadie puede quejarse de la Providencia Divina, porque los sufrimientos que se padecen son consecuencia de no seguir su luminosa estela.

   Confía, persevera y avanza sin miedo, con íntima consciencia de lo sutil e intemporal, en medio de todos los asuntos de la forma y el tiempo. Permanece atento al presente luminoso, diluyente de pasados o futuros proyectados, que muestra con Amor infinito la senda que conduce a la Divina Unicidad, ese tránsito sagrado que es senda de Plenitud y Vida. Sé, pues, constante, y no te distraigas con efímeros deleites corporal/intelectivos que sólo traen, al poco, sufrimiento y confusión. Abre tus ojos a la luz de lo puro, bendito e infinito, y permite que te devuelva a lo indivisible. Tan sólo hay que prestarle atención a sus inspiradoras señales que acompañan, tanto interna como externamente, a todo devoto sincero que ya se ha cansado de intentarlo a sus maneras y antojos. No importa cuan enorme sea la tempestad que nos zarandee, en lo mundano o en lo anímico, su amorosa condición universal salvará el corazón de toda malicia o desánimo. El mundo nada puede contra lo Divino, ni lo temporal eclipsar siquiera a lo eterno. La paz diluye todo aparente conflicto -por cruento que se muestre- y la abundancia de lo santo, en el Espíritu, no conoce disminución ni pérdida alguna al Ser Bienaventurada Infinitud Viviente.

KHAAM-EL



Tina Turner cantando el mantra sánscrito Sarvesham Svastir Bhavatu.
Cuya traducción es la que sigue

Om Sarvesham Swasti bhavatu:  Puedes ser auspicioso para con todos 
Sarvesham Shantir bhavatu:  Que la paz sea con todos 
Sarvesham Purnam bhavatu:  Que la plenitud sea con todos 
Sarvesham Mangalam bhavatu:  Que la prosperidad sea con todos. 





miércoles, 27 de febrero de 2019

COMPRENSIÓN ESENCIAL

   Mira cómo miras todo lo que miras y cómo razonas sobre todo lo que escuchas. Comprende lo esencial o no comprenderás nada verdadero. Y no comprender lo verdadero es permanecer en la mayor de las ignorancias al estar ésta engreída de un supuesto saber que no comprende que no comprende. Medita... Ahonda... Conoce. No sueñes más con personales despertares o seguirás durmiendo en la dolorosa vanidad del ego, encarcelado tras una idea que te limita mientras imaginas que esa idea te llevará a la libertad. Aparentar y fingir ante los demás no engaña al engañador. Ascender y ascender en lo que se derrumba sólo trae caída. Aprender y aprender lo variable no varía la ignorancia sobre lo invariable. Acumular y acumular lo pasajero no acrecienta ni un ápice lo pleno. 

   Conoce... Ahonda... Medita. ¡Despierta! Comprender que ha de desaprenderse todo aquello que pretendía enseñarnos quiénes somos en verdad desde la idea que no somos pero que creíamos ser, es la Comprensión Esencial que nos ilumina desde Eso que nunca pudo estar realmente ensombrecido, hasta quedar sólo la ilimitada vivencia de Eso; mostrándose de nuevo, desde lo más hondo y sagrado, el esplendente fulgor de la Eterna Bendición y el Amor, de la Inconmensurable Dicha de la Divina Unicidad. Evidenciándose sin esfuerzo ni enrevesadas cavilaciones -aquí y ahora- nuestra naturaleza inmortal, la Presencia Consciente, la Plenitud de Ser Vida en Comunión.

KHAAM-EL



Vivencia aquí y ahora ESO 
que trasciende en plenitud toda percepción, 
todo límite o conceptualización...

Ahonda... Medita... Conoce...

OM SO HUM: Yo Soy ESO




martes, 26 de febrero de 2019

VUELA LIBRE DE LA IDEA DE TI...


Despliega las alas del Espíritu
y álzate más allá de tus conceptos,
allende teoremas o azares,
muy por encima de euforias y congojas.

No mires atrás.
No sopeses lo que nada vale
y regresa a la consciencia intemporal.

Sí... no te agarres al ego.
Vuela libre más allá de ti,
más allá de éstos, ésas o aquéllos.

Vuela... Vuela...
Vuela libre de conflictos.
Vuela libre y sé feliz.
Vuela libre de todo juicio.
Vuela... Vuela...
Vuela libre y en paz...

Ahora,
siempre
aquí.

KHAAM-EL



Vuela por encima de todas las definiciones
que hayas llegado a creer acerca de ti
y que proyectabas sobre el mundo...
Y sé libre 
viviendo feliz aquí y ahora, en paz... 
en plenitud.




lunes, 25 de febrero de 2019

LO INCONMENSURABLE - VÍDEO

   Adjunto a este escrito publico el vídeo de una charla en la que incido en cómo Lo Inconmensurable es nuestra realidad inmutable desvaneciendo nuestra aparente e ilusoria identidad  limitada y mutable.
   Mantente atento al instante que ahora vives con plena consciencia y no te distraigas con juicios y opiniones que todo lo dividen y subdividen en reducidos ámbitos de rígidas categorías. Aquiétate y confía. Ábrete a lo inefable. Medita. Atiende. Como fácilmente puedes constatar, el mundo y sus breves asuntos es superfluo e intrascendente, mientras que Lo Inconmensurable -al silenciar al divisor ego con consciencia consciente- se revela como nuestro ser esencial comunicándose aquí y ahora en plenitud.

KHAAM-EL


Aquí y ahora Lo Inconmensurable
abarca y trasciende todo lo mensurable;
por tanto, Lo Inconmensurable es real 
mientras que lo mensurable es ilusorio.





domingo, 24 de febrero de 2019

DELIRIO = EGO; REALIDAD = DIVINA UNICIDAD

   En un delirio no eres visible ni invisible, ni siquiera puedes saber que sabes; únicamente puedes atisbar, paradójicamente en la paradoja, que en ella todo lo que sabes no es saber en absoluto, pues en un sueño uno cree ser quien no es dentro de quien si es. Sin embargo, como todo en ese delirio es percibido como separado y segmentado, como diferente e inseguro, semejante a un tablero de juegos en el que cada cual ocupa un lugar especial por el que pelear para no verse apartado o derrotado, uno lo considera muy pero que muy real si no es consciente de la consciencia misma. Es por esto que el desconcierto anida siempre en una mente dividida, apareciendo así la percepción de los opuestos con sus angustias disfrazadas de brillantes estrategias y sus persistentes dudas ocultas tras fanatismos de estéril resultado que se pierden en búsquedas externas que teorizan con respuestas que nunca satisfacen a ese yo que se siente íntimamente segmentado (ego).

   En esa ausencia de lo esencial, lo irreal se toma por real. Y uno camina, entonces, como una sombra detrás de absurdas e inestables opiniones que -desde la desesperación de lo personal- se consideran importantes. ¡Despierta! No vivas en el olvido de los sueños creyendo razonable la locura ni sucumbas a la delirante tentación de que temblar de miedo es normal. Aquieta el frenesí conceptual con el que torpedeas tus cimientos más elementales. Sí, no vivas apegado a lo que muere o soñaras muertes como si de auténticas vidas se tratase, cuando no son más que delirios e inconsistencias. Deja de pelear con tus propias peleas y haz las paces con esa lucha interna que te externaliza en un espejismo; para de contarte la grotesca historia de buenos y malos irreconciliables a la que intentas escribirle un final que no atinas a dilucidar, como si de un gnomo o un ogro desconcertado por su propio cuento se tratase, o como de una garganta muda que no parara de vociferar silencios suponiendo que así comunica algo.

   Ahonda... Comprende... En un delirio 1º Tus ideas se reducen a la identificación con un cuerpo separado de otros cuerpos con los que procuras mitigar tu soledad, a la vez que atesoras objetos y dinero intentando tapar carencias; más, hagas lo que hagas, la sensación de soledad y carencia persiste. 2º Te sientes ignorante, pequeño y aislado, e inventas ciencias, religiones o supersticiones, para darle sentido a la demencia; pero la lógica de un delirio no tiene porque ser verdadera ni tranquilizadora, y por tanto siempre te deja un regusto amargo y un ánimo desolado e inquieto. 3º Buscas entonces ser distinto, especial, y vas detrás de renombre y poder. Persigues la gloria; pero, aún consiguiéndola, en tu interior perdura una desazón que perpetúa tu insatisfacción, puesto que irremediablemente lo particular siempre termina por sentirse amenazado por lo diferente. 4º Anhelas luego fundirte con la masa, acogiéndote a sus directrices creyendo que te dará seguridad; aunque tan sólo descubres, apesadumbrado, que tu incertidumbre aumenta. 5º Pretendes después ser humilde y destacar mediante la virtud y la bondad, pero, igualmente, semejante pretensión se queda en algo hueco y egoísta, una mascarada que hace que sigas sintiéndote falso e incompleto. 6º Desesperado, al poco, te revuelves en tu mente buscando una salida al personaje que crees ser; sin reparar en lo evidente, que al negar tu realidad -al apegarte a tus sueños y proyecciones futuras- no niegas la irrealidad de tus negaciones y reniegas sin darte cuenta de la Verdad que te hace libre. 7º Con semejante ansia, quieres tener razón a toda costa y desesperas por dejar de desesperar poniéndole a todo calificativos y precio, mientras -al creer saber lo que te conviene adquiriendo lo que es vano- te diriges temerariamente a ninguna parte, porque perseguir deseos es ir en pos de nada. 8º En éstas, inexorable, el tiempo te consume en el tiempo, y cada vez te sientes más y más frágil, efímero y vulnerable; observas como tu rostro envejece y que tu entorno varía descontrolado. Nada permanece estable por muchos equilibrios, sortilegios, deducciones o teorías que hagas o asumas. Tus conceptos, por tanto, se vuelven rígidos buscando defensa; pero, justo así, es a ti mismo a quien más atacas, porque lo inflexible termina siempre por quebrarse y cuando algo se rompe duele. 9º Horrorizado, acabas por entrever la idea de la muerte como única salida posible a un pavor aún mayor al que se tiene por esta misma; ya que el sufrimiento absurdo de asirse a lo que se desmorona se torna insoportable, y llorar lloros finalmente desborda y empantana. 10º Y finalmente, en medio de la conciencia de lo devastador, sumido en el espanto y dolorida el alma en su núcleo, se detiene el impulso personal. Así, en la rendición de todos los delirantes planes del ego, en lo más profundo de tamaña angustia, en lo más oscuro de la tiniebla más tenebrosa, de la entraña de las entrañas, inesperada, bendita, gloriosa y milagrosamente, por la Gracia surge, de súbito, la Luz... Abres con alegría los ojos del Espíritu, que cierran los del cuerpo al no significar sus límites perceptivos, y Despiertas a la Infinitud del Ser... a la Plenitud del Amor... a la Divina Unicidad.

   Ahora, en el tiempo se vive lo intemporal; en lo íntimo lo universal; en lo aparente, lo veraz. ¡Bendiciones! Nada real ha estado jamás en peligro. El sufrimiento no tiene ninguna solidez y la desesperanza, la separación, el miedo, la enfermedad o la misma muerte nunca han tenido existencia en la Existencia. Al fin ríes de veras, sin necesidad de mitigar llantos; pues sabes, vivencias y extiendes, que tanto la limitación como la angustia del ego no son más que ideas ridículas que una breve e insignificante ensoñación delirante imaginó, pero que al instante, en la santidad de lo eterno, se desvaneció, y toda forma y todo cuento y toda personal justificación y todo segmentado delirar para nada afectan nuestra indivisa comunión con la Vida, la Verdad y el Amor.

KHAAM-EL



No te duermas en los amargos delirios separativos del ego
y despierta a la realidad del Amor Divino...
Regresa al aquí y ahora...
Todo en la Luz es visto indiviso de la Luz.





BREVES REFLEXIONES A CONSIDERAR (y 21)


           1.
   El fuego del infierno destruye la paz y la alegría. El fuego del Espíritu crepita en la plenitud del Amor. No busques, por tanto, la solución a tus dilemas en lo que se aja ni quieras paz en lo contradictorio, o sufrirás. Todo ansia deriva finalmente en angustia y toda angustia abrasa el ánimo con el desolador infierno de la perpetua insatisfacción. Confía. Arde en la Verdad y déjala que queme todo lo que te quemaba, pues ya sabes que el fuego del infierno abrasa y atormenta mientras que la llama del Espíritu purifica y libera.

           2.
   Confía aunque lo adverso te sacuda. Sí, no desesperes cuando las circunstancias en tu vida se perfilen hostiles, frías e infructuosas. Ten paciencia y recuerda que todo gélido invierno deviene al fin en cálida primavera y que tras la más furiosa de las tempestades siempre llega la estabilidad y la calma.

           3.
  Lo esencial es indestructible, trasciende todos los opuestos y vivifica plenamente como un río sin orillas vertiéndose sin fin... Medita y Conoce: Eres más ligero que el aire pero tan firme como una robusta raíz.


           4.
   Ni siquiera el uno tiene significado en lo eterno, real y santo: únicamente 'No dos', Es.

           5.
   Sólo hay un misterio a desvelar y es creer que alguna vez pudo haber un misterio que nos ocultara lo real. Simplifica. Nada hay que adquirir, puesto que nada se ha perdido en lo esencial. La Luz es Luz y la Consciencia es Consciencia. Sencillamente no hay nada oculto a la Consciencia... ahonda... medita... Despierta...

           6.
   Despertar... la prisión se desmorona y sólo queda lo abierto, lo sin fronteras... súbitamente todo adquiere un fulgor intenso que embellece, sin igual, todo aquello que antes parecía separado de uno... el tiempo ya no atrapa... las formas van y vienen, nunca nos han definido ni definirán... lo ilimitado es vivido eternamente ahora... Y sonreímos... nada nos ata... nada nos aprisiona... nada nos condena ni condiciona... Libertad... Amor... Divina Unicidad.

KHAAM-EL



Lo verdaderamente importante, ya es ahora,
plenamente...
en Consciencia clara e inmediata.




viernes, 22 de febrero de 2019

MÁS ALLÁ DEL EGO - AUDIO

   Acompaña a este escrito el audio de una charla en la que ahondo en la consciencia clara que se vivencia cuando vamos más allá del ego y sus conjeturas.
   Identificarse con un yo especial/personal (el ego) nos atrapa en unas memorias reactivas que suponemos son libres cuando en verdad nos encarcelan tras los muros limitadores de lo separativo, angustiado y temeroso. Más si contemplamos el ego sin identificarnos con él, si vamos más allá de él con plena consciencia inmediata, sin expectativas ni remembranzas, la libertad de Ser se manifiesta al instante ilimitada, al desplegarse sin ninguna injerencia especulativa... sencillamente aquí y ahora paz, dicha, plenitud, Amor... Divina Unicidad infinitamente presente.

KHAAM-EL






Enlace directo del audio en IVOOX



jueves, 21 de febrero de 2019

ES EL TIEMPO UNA ILUSIÓN

   Realidad es claridad y no débil luz entre nubarrones que difuminan todo bajo su cambiante sombra. La experiencia viva de lo real es la clave. En lo esencial todos ya estamos salvados, porque nunca se ha visto afectado por la variabilidad de lo superficial, distinguido y aparente. En consecuencia, el supuesto futuro de plenitud realmente es pasado. Ahí es donde la conceptualidad del ego queda atascada, en su vano intento por entender lo universal e intemporal desde lo limitado y pasajero. ¡Ojo con presuponer! Ahondamos en esta idea crucial, se dicen cuatro frases sugerentes, se ponen dos ejemplo llamativos, y el sistema de pensamiento egoico se atribuye haberlo entendido con pronta suficiencia; más, en verdad no ha entendido sustancialmente nada. Y ¿sabes porque no lo entiende aunque lo crea? sencillamente, porque lo personal tiene exclusivos deseos para sí. Y, lo que tiene deseos para sí, entra en conflicto con lo que pretende conseguir, al experimentar su carencia por justificar su búsqueda; elaborando, en tal suerte, una sensación de anhelo o repulsa, según quiera conseguir algo o apartarlo. Y, esa sensación que toma por natural fabricada desde su perspectiva personalista, es la insidiosa sensación del tiempo. 


   Siempre que uno se identifica con el ego vive atrapado en el tiempo, ajustándose de inmediato a un tiempo particular diferente al del resto, puesto que en el tiempo todo es relativo respecto a todo. Y ésto sucede al creer que se está dentro de una sensación específica, de una especial manera de percibir. Entonces, al experimentar una comezón particular exigente de una acción sujeta a ella, que no hace sino acrecentar el sentir personal, todo se vuelve confuso y desalentador tras breves períodos de impulsiva euforia. Así que, mientras se está en la percepción del ego, los pensamientos que la significan no pueden realmente entender lo que intentan entender, al depender enteramente de esa subjetividad para sentir una presunta objetividad vital considerada como separada del resto de la vida.

   La clave para salir de semejante paradoja perceptivo/intelectiva, que es esa sensación egoica que fabrica el forma/tiempo, y poder retornar a la realidad plena e incontrovertible, es destruir su paradójica hechura en su raíz. Simplifica. Indaga. Medita... Toda forma se deforma y todo tiempo pasa. Profundiza en lo esencial. Porque, repito, sin duda el tiempo, junto a sus cambiantes situaciones, es una sensación en la consciencia. Por ejemplo, cuando tienes que ir a un sitio que no te gusta nada y preferirías no ir, ¿Cuándo sucede el malestar? Evidentemente ahora, justo cuando aún no has ido pero sabes que has de ir; luego, sin duda, es un presunto malestar futuro que experimentas en el presente. Por ésto, el futuro es en verdad pasado, ya que para sentir el malestar en el presente acerca de una experiencia futura has de proyectar en ese futuro, ahora, un recuerdo del pasado con el que el porvenir es juzgado de antemano. Es evidente que, para juzgar que algo que ha de venir te disguste o te atraiga, has de haberlo pensado con anterioridad al hecho mismo. Toda la sensación del tiempo es, por tanto, un recuerdo personal, proyectándose desde una desconfianza separativa (el ego) que fabrica espacios diferentes en los que esconderse de sus propios pensamientos de angustia. Contempla con consciencia como toda tu incertidumbre futura es una reminiscencia pasada repitiendo su sensación de aislamiento, un sentir especial que te diferencia y te empuja a luchar por sobrevivir dentro de una frágil idea de ti.

   La infelicidad y el sufrimiento son una idea personal, no una realidad universal. Mañana es nunca, y, al igual que el ayer, nunca se encuentra en el presente, que es donde realmente se está siempre y donde la dicha y la paz son firmes, vívidas e indestructibles.

   Deja, pues, de darle significado a tus juicios personales, no los proyectes desde esa sensación particular que sacándote del presente futuriza ayeres en un sueño fútil. Abandona el miedo surgido de los deseos no significándolos y encontrarás el Amor; ese poderoso acto de total inclusión, que corta de raíz la paradoja del ego, desvaneciendo sin contemplaciones su pesadilla buscadora de exclusivos paraísos imaginarios, que siempre se derrumban en su huida de infiernos soñados tomados por reales. ¡Despierta! Vive presente, ecuánime y consciente. No te anticipes, ni para bien ni para mal, y haz ahora, siempre, lo que debes desde la paz de espíritu, para que ésta abrace toda la sensación del ego (el tiempo y sus escenarios) y lo perdone de inmediato en toda su aparente multiplicidad separativa. Mantente presente en el presente con consciente presencia. De un solo tajo, así, la raíz de la paradoja ha sido al fin cortada y la plenitud intemporal del Ser brilla de nuevo en la perfecta quietud de lo incondicional e inefable. La experiencia viva, constante y definitiva, desvanece toda la ilusión del ego, para no dejar rastro alguno de esa experiencia imaginada de lo transitorio, que fabricó muertes imposibles pensándolas posibles. Distiende tu pensar. No sigas los dictados de tus sensaciones e irás más allá de todo más allá; encontrando acá, precisamente ahora, en la consciencia consciente de ser consciencia, lo eterno e indisoluble.   Ahonda. Medita. Conoce.

KHAAM-EL



En el tiempo ya se encuentra la eternidad
y la forma sucede en la inmutabilidad de los in forma.
¡Despierta!
Una ilusión sucede dentro de lo real.
Un pensamiento aparece en la mente.
Un sueño es sólo una pasajera sensación 
de separativa apariencia.




miércoles, 20 de febrero de 2019

INTIMO SENDERO DE LIBERTAD

   No busques tu propio sendero en los caminos ajenos ni prefieras lo que otros prefieren o te demorarás queriendo vivir lo que otros viven, olvidando vivir la vida que en ti se manifiesta aquí y ahora, espontánea e incontenible, libre, profunda e infinita, plena y bendita. Mantente imparcial en lo parcial y verás allende las apariencias que te cegaban. Nada va mal en lo esencial. Sé fiel al pálpito de tu corazón y no lo protejas con temores surgidos del ego y sus comparativas argucias. Confía. No busques atajos al presente o te perderás en los vericuetos del tiempo que te precipitan al infierno mientras sueñas con cielos a la medida de tus juicios.

   Toma conciencia de la consciencia y no creas saber qué es la dicha o la paz verdaderas mientras insistas en querer escapar de la aflicción o de la angustia buscando refugio en el vano trasiego mundano. Mira el irrazonable razonar del ego con clara visión y no seas maestro de temores, resentimientos, culpas, penas o furias, o te convertirás en discípulo de la desesperanza, el horror y la muerte. ¡Despierta! No enseñes eso... no te enseñes eso. No te arrogues saberes que te sumen en la ignorancia, sé humilde y detén todo personalista discurso mental no dándole valor, abandonando su tentador especialismo por la total renuncia a seguir su engreído cálculo. Pretender dilucidar el acertijo del laberinto temporal dentro de sus ensortijados muros en perderse caminando en círculos. Reposa en el instante que siempre ahora vives, ni antes ni después. La felicidad no está en el mundo sino en tu corazón. No te apures. La salida se encuentra en ti, no afuera. El sendero a la libertad que tanto buscabas en lugares extraños y tierras ignotas, en ritos sacros o teorías varias, siempre has sido tú mismo. Sencillamente elévate por encima de todas las nebulosas historias del ego y sin duda estarás fuera del encierro, estarás en la luz sin penumbra, en la dicha sin pesar, en la paz infinita, en el Amor y la Vida.

KHAAM-EL



El camino interior
es el sendero que atraviesa temores y deseos,
desenmascara palabras y pensamientos...
hasta encontrar la libertad que uno pensaba perdida afuera...
dentro muy dentro sonrisas, comprensión, pureza, bondad, Amor.
Sí, dentro muy dentro la Luz... toda la Luz.



martes, 19 de febrero de 2019

DIOS


"Esto es Ello
Y Yo soy Ello
Y Tú eres Ello
Y también lo es Eso
Y Y Él es Ello
Y Ella es Ello
y Ello es Ello
Y ya Está."

James Broughton.


   Hoy es hoy, siempre aquí, siempre ahora... desecho mis anhelos futuros y suelto mis remembranzas. Dios. No opino ni especulo acerca de Ti. Dudo de mis dudas inquisidoras de otras dudas y silencio mi particular juicio. El mundo de mis sueños se derrumba una y otra vez. Mi carne es frío sepulcro. Repudio mi repudio y niego tu lejanía al no validar ni un segundo más mis propias y exclusivas afirmaciones. Anhelo lo inefable, aquello que está más allá de todo anhelo. Dios. Al abrigo del helor de tu supuesta ausencia, mi corazón late reconfortado tras abandonar toda suposición y descansar bajo el calor que ofrece el manto de la inmediatez libre de expectativas. Silencio. Comunicación esperada... Alzo mi frágil fe para que sea bendecida con la fortaleza de los santo. Invoco a la Verdad. Clamo por el Amor. Busco dejar de buscar para expresar el significado hondo del perdón, para sentir el benigno abrazo de lo incondicional, para dejar de soñar pesadillas que soñaban inútilmente con dejar de serlo. Dios. Gracias... inesperadamente brotan de un reseco y olvidado manantial, en la honestidad de un presente totalmente rendido, gotas de renovada confianza.

   Dios. Pronuncio tu nombre innombrable en la quietud de lo inmediato. Lo pronuncio con la palabra que aspira a lo sin palabras, sólo todo devoción, con insistencia ardiente. Dios. Dios. Te imploro y no escucho Tu respuesta. Mutismo. Vacío. Calvario. Dios. El fuego consume mis ateridas entrañas y la sed reseca mi paladar anhelante de agua de vida. Dios. ¿Dónde estás? Dios ¿Dónde estoy sin ti? Dios. Sigo pronunciando ardorosamente tu innombrable nombre. Con ímpetu avasallador. Con vehemencia. Con hambre. Con esperanza. Dios. No más miedo. No más recelo. Dios. Te oro, ya sin temor. Ensombrezco mi sombra para que sólo haya tu brillo. Dios sin faz y Dios de múltiples rostros. Dios presente. Dios esquivo. Dios ausente. Dios pleno y vacío. Dios rebosante y desbordado. Dios íntimo. Dios de todos. Dios inmenso y minúsculo. Dios más allá de dioses o no dioses, de razones o sinrazones. Apasionadamente te invoco para que sea traspasado mi mísero intelecto de arrogante avidez con la sencillez de la paz, de la infinita paz mental.

   Dios. Rindo mi propio buscarte para que seas Tú quien me encuentre. Espero. Acepto. Confío.  Agradezco en oración profunda, sin palabras que quieran definirme ni definirte, un aquí y ahora sin condiciones... ¿Quién Eres? ¿Quién soy?... Y, súbitamente, Dios, mi sordera se cura y mi ceguera se sana cuando dejo de darle valor a lo que los oídos y ojos del cuerpo escuchaban y veían... al fin el Silencio que acaba con el mutismo de la palabra egoica. Desde el núcleo de los núcleos, la infinitud; en lo más hondo de lo hondo, lo elevado... Tu Palabra de Amor, Dios, me vivifica con clara rotundidad incuestionable, con prístina y bienaventurada santidad, colmando el ansia de mi incertidumbre con la certeza de lo Eterno.

   Gracias. Dios. Caigo de mi caballo desbocado. Muerde el polvo mi orgullo. Oquedad. Muere lo prescindible... sólo la esencia permanece. Dios. Mi alimento es lo ingrávido. Llenura. Renazco a lo Inefable y se desata el nudo inútil de la carne. Mi sustancia es meollo y periferia indivisible... No soy sin Ti, no Eres sin mí. ¡¡Despertar! La pedagogía evolutiva de un persona yo hacia una supuesta mejora se desmorona en la precariedad de su ilusiva hechura temporal. Lo que es, Es. Vida. Dios. Eternidad. Dios. Yo y Tú eternamente indistintos por la gracia del Amor. Todo está ahora claro. Todo brilla ahora sin velos en la Plenitud del Ser... la oscuridad no existe en la Luz, las falacias no pueden con la Verdad, las lágrimas se evaporan en el océano inacabable de la Dicha. Dios. La mirada que mira miradas o esta sujeta a lo que mira... Visión esplendente: lo inarticulado es más consistente que la configuración de mundos y galaxias... estallidos de color pintando la transparencia por breve lapso. Verbosidad callada y sereno tronar en el latir de un tiempo que no rozo siquiera un poco lo intemporal. Alegría. Paz. A Dios Gracias la nada de un yo imaginado se disuelve en su irrealidad y emerge lo sustancial. Lo esquivo no era esquivo, únicamente aparentaba serlo para ese yo inexistente. Dios siempre ha estado cerca... más cerca de mí que yo mismo. Milagro. Despertar real. Compleción. Las paradojas se resuelven sin necesidad de resolverlas en la unicidad que las trasciende... Calma. Sosiego. Bendición. No hay palabras posibles para expresar el significado último de la Palabra. Dios.

   En el resplendor inmaculado de lo Santo todas las cosas de este mundo, junto a todos sus seres pasados, presentes y futuros, refulgen. Todos, todo... somos ese fulgor. Dios. Una vieja idea se cicatriza y ya no duele más... porque en realidad no pudo realmente dolernos nunca... no somos sufrimiento; somos bienaventuranza, ilimitada bienaventuranza. No hay abandono posible... nunca hubo expulsión del Paraíso. Todo fue un pesadilla que una vez despierto no tiene enjundia ni afectó realmente al que la soñó. Gracias Dios... Soy en Ti, Eres en Mí. Divina Unicidad. El ego tan sólo un vano juicio inocuo... un soliloquio dialogado... una fugaz nube en la transparencia... un yo sin Ti que nunca fue. Dios... Únicamente existes Tú, y todos en Ti... Dios Eres Amor... Somos Amor... Todo Es Amor... Sólo existe el Amor. Amén.

KHAAM-EL



Dentro... muy dentro
en el corazón entregado
arde el fuego del Amor de Dios
que nos infinita en Él.




lunes, 18 de febrero de 2019

AHONDANDO EN "EL AMOR DE DIOS ES MI SUSTENTO" (Lección 50 de UCDM) - AUDIO

   Junto a estas líneas edito el audio de una charla en la que profundizo, con la ayuda inestimable de la lección 50 de 'Un Curso de Milagros', en la constatación de cómo se encuentra ya en el presente la paz de Espíritu que nos libera por completo del enrevesado elucubrar del ego (esa dolorosa manera de pensar que nos tentaba a la pequeñez de lo temporal/separativo), y poder así nuevamente vivenciar la plenitud eterna y esencial de sabernos Hijos de Dios.

KHAAM-EL






Enlace directo del audio en IVOOX




domingo, 17 de febrero de 2019

EXPERIENCIA VIVA, DIRECTA, INMEDIATA... 'NO DOS'... AMOR

   Ve en la dirección interior, hacia ese encuentro con la infinitud del Ser... hacia esa vivencia que trasciende todo lo que muere. No busques la felicidad en el llanto ni pretendas hallar la paz en lo contradictorio y definitivamente deja de buscar tu contento fuera de ti. Toda luz exterior más pronto o más tarde se debilita y apaga; más el brillo del Alma es eterno en su perfecta unicidad con lo esencial, amoroso, calmo, bienaventurado y pleno. Sé consecuente y no persigas acumular inconsecuencias. Aquello que encuentras en lo externo te pierde, pues no son sino fantasmales encuentros vestidos con atrayente colorido pero de pronto desteñido e inevitable despedida. Sí, ve a lo interior; cesa de girar y girar a ninguna parte por asir lo exterior, el fin del tiempo y las formas, el Cielo y Su plenitud, es en lo más hondo de tu consciencia... descubre el Paraíso ahí donde siempre ha estado: en lo más puro de tu corazón enamorado, ahí donde todo es aquí, ahí donde el miedo acaba y nosotros somos Uno... Nirvana eres tú/yo mismo, sin ego. Simple: ya eres/soy lo real y eterno, sin necesidad de lo transitorio e irreal. 

   Sé experiencia viva, directa, inmediata... Sí, sé ahora, sé aquí... Atiende sólo a lo esencial no identificándote con lo que deja de ser... Sé tú sin ti y serás plenamente. No lo enreveses todo con suposiciones de ilusoria urdimbre. Comprende lo que está más allá de toda personal comprensión: cuando se desata un nudo éste queda en el olvido y la cuerda sigue siendo sin duda la misma cuerda. ¡Despierta! Sé consumación... Sé esencialmente religioso y descubre Ser lo que Eres. Todas las religiones, en su luminosa simplicidad original, conducen a la vivencia de lo sin palabras, utilizando éstas como puentes a lo infinito e inefable. Esa y sólo esa es la sugerente y evocadora sustancia del Mensaje Perenne que las palabras invitan a reConocer: facilitar la Visión de lo invisible para los ojos del cuerpo, aguzar el oído interno para escuchar únicamente la Voz de lo Santo, preparar para el abandono de toda preparación, robustecer la confianza en el milagro de la Gracia... palabras deshaciendo palabras, acercando a lo indistanciable, a la íntima Verdad de la Vida, a Su bendita ilimitud... palabras que abren la mirada del Espíritu al cerrar la ceguera del particular ver... contemplación sencilla de lo sublime desde el puro Espíritu que trasciende la letra que lo evoca e invoca... 'no dos'... Amor... Divina Unicidad... Feliz reEncuentro de Ser indivisos con Todo Lo Que Es.

KHAAM-EL



La luz del Alma conquista el Paraíso que en su interior siempre mora
rindiendo la experiencia muerta del ego
y retornando a la experiencia viva del Espíritu
que se manifiesta en la sencillez de cada día,
en la gratitud sincera y el amor verdadero, 
en la felicidad compartida y el acogimiento en paz.
Ahí, en esa auténtica libertad de vivir liberando 
se halla el Paraíso
que ya en este mundo nos evoca lo Eterno
gracias a un corazón totalmente abierto...
Yendo más allá de los nombres, más allá de los precios,
más allá de cuestiones o lamentos
hasta nuestro Hogar Santo en el interminable Cielo.




sábado, 16 de febrero de 2019

ESCUCHA A TU ALMA


Silencia tus dudas, 
siléncialas...
Escucha a tu Alma,
escúchala...
Y la cruz se hace Luz.

Destierra tu furia, 
destiérrala...
Acoge la calma,
acógela...
Y libre el Alma vive.

Ama tu esencia de Ser,
ámala...
Sí, ámala...
Amándote, amas,
Amando te amas.

KHAAM-EL



Atiende a lo esencial...
Escucha lo íntimo y sagrado...
Y vive en plenitud.



PUREZA - AUDIO

   Junto a este escrito introductorio edito el audio de una charla en la que ahondo en ese espacio libre de rincones que es una mente en paz para reEncontrar la pureza en lo más íntimo y esencial de uno.
   Todo lo que desespera y mancha el presente con los resentimientos del ego (yo separativo), por mucho que acucie y acorrale el ánimo por un tiempo en el tiempo, al ser transitorio en última instancia es vano, superficial e ilusorio. Sin embargo la pureza, por su sencillez, no beligerancia y plenitud, es esencial; y por lo tanto real, perenne, liberadora e inefable en su consistencia vital (Ser).

KHAAM-EL






Enlace directo del audio en IVOOX



jueves, 14 de febrero de 2019

EL VERBO PRIMIGENIO +


   El silencio de las cantidades revela la voz del Alma...
   Cualquier estructura o especial normativa de numérica comparación es resultado del vano cálculo de una mente temerosa.

   El silencio de las palabras desvela la voz del Alma...
   Toda creencia y todo concepto de calificativa escisión es consecuencia de la estéril verborrea de una mente insatisfecha.

   El silencio de los anhelos expresa la voz del Alma...
   Cualquier acto surgido de la sensoria percepción sucumbe a su propia contradicción y fragilidad si no atiende más allá del yo.

   Tan sólo la quietud de la mente, el no apego al pensamiento, el sí desprendido de todo aditamento, sin ningún quizás, con total consciencia, refleja el genuino ser del Alma extendiendo la acción correcta rebosante de compartida plenitud.

   El Silencio de los silencios, ese que destruye todos los ruidos egoicos -que con distractivo estruendo intentaban acallar la voz del Alma-, es el Verbo Primigenio... la Divina Unicidad... el Presente Intemporal... la Infinitud del Ser... el Verdadero e Inacabable Amor... puro Yoga... suprema Comprensión.

   Permanece, pues, en el Silencio de los silencios y reConocerás el Verbo Primigenio...
   Únicamente el Alma que se desprende de todos sus ropajes, que se deshace de todos los códigos y trasciende cualquier particular lenguaje, que se olvida de lo que es clasificable y de lo que no lo es, que atiende a lo indiviso de corazón e indaga en lo que está más allá de todo lo aparentemente indagable, es capaz de escuchar-Lo, intuir-Lo, atisbar-Lo, sentir-Lo... de hacerse una con Él... Y, por la Gracia, de súbito, en el tiempo como antes del tiempo: Ser-Lo.

KHAAM-EL
   


Ahonda... Profundiza... 
Toma Consciencia...
Medita...
Sé...



miércoles, 13 de febrero de 2019

LO ESENCIAL O ES PARA TODOS O NO ES LO ESENCIAL




   "Solamente cuando dejamos de tener miedo empezamos a vivir cada experiencia -dolorosa o placentera-, a vivir agradeciendo cada momento, a vivir en abundancia."

Dorothy Thompson




   En el mundo probamos decenas de estrategias, cientos de planes, miles de justificaciones, intentando encontrar una satisfacción duradera para un yo temeroso (el ego) que nunca llega plenamente a alcanzar, por mucho que se haga el valiente frente a lo que no puede evitar le angustie si antes no lo ha rehuido con impúdico descaro excusativo -que le deja igualmente con la amarga sensación del descalabro-. Únicamente cuando abandonamos la sumisión a sucumbir al embrujo que el miedo provoca o renegamos de la temeridad de disimularlo podemos mirarlo de frente. Y así poder de veras reconocer su absurdidad, su inconsistente discurso de recelo y poquedad, hallando de inmediato paz, libertad, alegría, Amor... viviendo al fin en genuina hermandad, presentes, sin la ansiedad de la carencia aún en medio de experiencias dolorosas o adversas... Y en esa fe íntima y desligada de lo egoico vivenciamos la auténtica abundancia: la Plenitud de Ser.

   Hemos de comprender con la claridad de un luminoso y bello día de primavera que la prosperidad o es para todos o no es prosperidad, que la alegría o es de todos o no es alegría verdadera, que la paz es para todos o nos son más que treguas entre batallas, que el Amor es de todos o no es Amor sino una triste mezcolanza de meras relaciones separativas que acrecientan el miedo. Así que reconozcamos que buscar la satisfacción individual en detrimento o ignorando la del prójimo no es más que una quimera que acaba por devorar a todo aquel que en semejante afán deposita sus miras. Porque ningún logro parcial puede ser considerado como tal, pues lo que no es íntegro no tiene verdadera sustancia y lo que no tiene sustancia termina por desmoronarse en su propia inconsistencia, dejando un sabor agrío y ponzoñoso en todos aquellos labios que besan apasionadamente las ostentosas baratijas de lo mundano.

   Despertemos hoy, aquí y ahora, para siempre, de la frustrante ilusión de que lo vano, superficial y aparente tiene algo que ver con lo esencial, real y pleno. No lo dudemos más, abandonemos los juicios que provienen del temor egoico y confiemos. No hay felicidad en el miedo ni encontraremos vida en lo que muere. La Luz disipa toda tiniebla sin esfuerzo ni tensión y lo eterno nunca puede verse afectado por lo impermanente. Vacíos de lo que vacía, todo; vacíos de lo que es nada, puro Ser. Ahondemos, pues, en lo sustancial, en lo nucleico, perenne e indefinible. Seamos conscientes de la consciencia con lúcida conciencia y evidenciemos cómo lo esencial o es para todos o no es lo esencial... Y, de súbito, como dice la frase de la fotografía que encabeza este escrito: 'Sentimos libertad. Respiramos paz. No juzgamos. Nos respetamos. Nos queremos. Nos Amamos. Hemos hecho (por fin) lo único que nos quedaba por probar: Vivir sin miedo'.

KHAAM-EL



Lo esencial es como una flor en el desierto,
por muy árido que éste sea
gracias a ella 
en él hay vida, fragancia, belleza.
De igual manera 
por muy penoso que sea nuestro estar en el mundo
gracias a la pureza del Alma
en él hay eternidad, inocencia, Amor.

Nunca olvidemos lo esencial:
La vida es del Espíritu, no de la carne.

NAMASKAR




martes, 12 de febrero de 2019

EL AMOR ES LA MELODÍA DEL ALMA

   El corazón de las cosas comulga con lo esencial y despliega pureza y amor, porque eso que no puede verse ni tocarse, pero sí vivenciarse en profundidad, libera de cualquier distracción de la percepción, mostrando un bien y una hermosura que no pueden contenerse ajarse. Ahonda con firmeza en lo más profundo de tu ser. Atiende a tu alma. No te disperses. Hay en el corazón una música que acaba con todos los conceptos. Silenciando ese sordo fragor discursivo que agita la mente, podrás escucharla y, así, transmitirla mediante una resuelta actitud ante la vida. Compartirás dadivoso esa bendita música de íntima llenura, porque ahora, sin conceptos ni personalismos, por fin sabes que... disuelve todas las desconfianzas y rencillas con sus precisos arpegios; descarga de culpas e insidias con la pureza de su son; amansa la cólera y fulmina el estrés con un par de acordes; comparte dicha con generosa efusión; ahuyenta el miedo; destapa todas las vergüenzas, dejándonos felizmente desnudos e inocentes ante la verdad; resuelve todas las preguntas en una solución inmediata llena de alegría y libertad; acalla el ruido de la mente para inundarla de colorido, ritmo y auténtico significado; une con el prójimo en una danza de fraternal sintonía; sacia el hambre más voraz con una energía inagotable de confortadora plenitud; infunde coraje en las horas de vicisitud e incertidumbre; alumbra en medio de la mayor de las negruras, desvaneciendo depresiones y congojas mediante sus rotundas notas de despertar; salva del influjo de lo temporal con su intemporal cadencia de cohesiva compasión y comprensión sustancial; vivifica emitiendo su esencial nota en la sinfónica orquesta de la comunión del espíritu... La música del alma transmuta el sufrimiento en creativa bienaventuranza que nos dirige hacia el Cielo.

   Disfruta del silencio de la mente para poder escuchar la melodía que la esencia Divina te canta con infinita dulzura desde lo más hondo de tu corazón. Paúsate y oye... después sonará, como antes de todo antes, la Sinfonía de lo eterno... la infinitud del Ser.

   La música que, con corazón totalmente entregado, brota desde lo más profundo del alma es Amor. No le des más vueltas, y permítele sonar sin tardanza en tu cotidiano vivir. Da igual si el mundo te entiende o no; tú hazla sonar, y vive con apertura de mente, con corazón bravo y ánimo amigable. Lleno de fe. Lleno de lo innombrable e inefable. Nada puede ir mal cuando se acepta con alegría el flujo de la vida. Comparte esa esplendorosa esperanza de lo eterno que la melodía más íntima expresa sin cesar. ¡Que no pare la música! Sal al mundo y cántale sin remilgos, con pasión, con la entusiasmada vehemencia de lo imperecedero, con la irrefrenable expansión de la paz de espíritu, con toda la potencia de una entrega sin medias tintas. ¡Sí! ¡La música del alma es Amor! No la silencies por temor. Vive sin miedo, y canta y danza y confía y acoge y comparte y agradece y bendice y sonríe y ayuda y resplandece y libera... Sin dudas, ¡Ama!

KHAAM-EL



No retengas por más tiempo la música que de tu Alma brota.
Sí, déjala brotar libremente 
y la melodía del Amor te colmará en plenitud...




lunes, 11 de febrero de 2019

RECUPEREMOS LA VERDADERA COMUNICACIÓN - VÍDEO

   Junto a este escrito publico el vídeo de una charla en la que profundizo en lo crucial de una comunicación directa y honesta, de corazón a corazón, para no caer en un aislamiento que sólo acarrea sufrimiento y temor.
   Seamos, pues, totalmente consecuentes y no caigamos en la incomunicación de la egoica comunicación, esa actitud individualista y resentida que diciendo que busca unir separa. Porque únicamente no justificando la contradicción, no alentando el recelo, no esperando particular triunfo, es cuando recuperamos la verdadera comunicación en ese compartir esencial que nos colma de Amor, Paz y Dicha, en ese convivir bendiciéndonos los unos a los unos.

KHAAM-EL


No huyamos del prójimo con mil excusas de doloroso enjuiciar
y comuniquémonos con él de todo corazón.



domingo, 10 de febrero de 2019

¿TE UNES AL CAMINO SIN RETORNO? ¿AL CAMINO DE LA PLENITUD? . .





"Mas ¿tú? ¿volver? Regresar no piensas,
sino seguir libre adelante."

Luis Cernuda






Confío...
... Con este escrito te invito y aliento a que te adentres en el Camino Interior para que liberado de temores y desconfianzas nos encontremos en lo Infinito... Sí, confío, lo tengo claro y decidido: Más ¿yo? ¿volver? Regresar no pienso... ¿Qué? ¿Te lanzas y nos unimos en el presente con consciencia presente? Y cómo dijo el poeta: "Más ¿tú? ¿volver? Regresar no piensas? sino seguir libre adelante"...

Confía...
... Avanza consciente del instante, sin mirar atrás, sin agitarte por lo de delante...
... La sequedad del alma nunca se halla en el presente. Únicamente se agosta en el tiempo porque éste es un pensamiento muerto que no podrá jamás saciar su sed en las evaporadas aguas de un imaginario pozo, ni regar su árido ánimo con inexistentes ríos y agotadas fuentes...

Confía...
... No hay mayor carga que la de rememorar, una y otra vez, el pasado creyendo que sus desvanecidas nubes traerán algún día la esperada lluvia a un corazón reseco. No hay óbito más oscuro que un nacimiento largamente pospuesto por temor a un porvenir esquivo e inseguro. Y no hay ceguera más pertinaz que aquella que siempre se contempla a sí misma en el yermo páramo de su añoranza...

Confía...
... Avanza cada instante con plena consciencia. Libre de ayeres y sin cábalas futuras. Nada hay que temer, ser de veras conscientes del ahora se basta en toda circunstancia para alumbrar la senda a seguir con claridad. Evocar gozos anteriores o anticipar acontecimientos es sufrir a destiempo padeciendo una agonía que se intenta paliar con el ilusorio bálsamo de las expectativas -que no es sino veneno-, pues creer que un plan especial traerá remedio y sosiego al desespero del alma atribulada siempre nos detiene justo ahí donde no queríamos estar...

Confía...
... No te pares en el tiempo y avanza en presencia. El ayer, al igual que el mañana, es hueco, insulso, carente de vida... superficial y absurdo. Y no hay mayor hastío que intentar llenar el vacío con vacío... El orgasmo de ayer no se goza ahora, el pan del mañana no alimenta hoy. Antaño no es hogaño, lo nuevo finalmente se avejenta y el latido dado nunca garantiza el siguiente. Todo al cabo desaparece; ergo acumular para perder, es ya carecer...

Confía...
... Avanza en la claridad y no te distraigas con ensueños. Añorar recuerdos es vivir rodeado de espectros en un purgatorio de esperanzas truncadas por indecisas decisiones que repican como campanas de muerte...

Confía...
... No te ensimismes con lo que no es. ¿Para qué intentar volver a lugares o situaciones que ya no son como piensas? ¿tú? ¿yo? ¿todos? ¿volver? ¿adónde?...
... ¿al pozo seco de la memoria que esconde el presente tras un recuerdo árido e inerte? Aunque a veces lo dudes, las pisadas de los ancestros no pueden alcanzarte...

Confía...
... Avanza al ahora siempre ahora. Vacía las alforjas que escondes dentro de tus sudorosas sienes cargadas de pretensiones y otras mieles de presunto dulzor longevo. En el tiempo no hay sabor que dure eternamente ni logros que calmen la voracidad desmedida de aquello que pretende desde una íntima inseguridad alcanzar seguridad... Sencillamente desdeña los consejos que el temeroso razonar egoico quiere inculcarte y déjate llevar por la amorosa corriente de la Vida que ilumina el instante al instante si no cierras tu mirada por mirar quimeras y presunciones.

Confía...
... No te agarres a un yo que te dispersa en millares de contradicciones y suposiciones que en vez de acercarte a la vida te la aleja. Mantente atento a la atención misma, aquí, ahora. Buscar la gloria en el mundo es fracasar porque poner el éxito en lo perecedero es perecer con ello. No te escondas ni evadas. El miedo niega el Amor aunque lo ansíe, al igual que una llama apagada no alumbra ni calienta. No olvides lo evidente: negar lo que niega afirma y debilitar lo que debilita fortalece...

Confía...
... Avanza al aquí incluyendo en él todo allí. Mira de frente el presente. Acéptalo. Vívelo. Fúndete en él. Es más, sé él y... sonríe. ¿Retornar? Cualquier tiempo pasado ya no está. Suéltalo con decisión y camina hacia adelante con la mirada fija en la meta... con la vista puesta en la libertad del peregrino que anda ligero y soberano, viajando sólo con lo imprescindible... sin ayeres... sin mañanas prefijados. Siendo presente, puro presente agradecido y feliz...

Te invito amig@ a esa confianza que celebra la vida en la intemporal plenitud de SER segundo a segundo, instante a instante, trascendiendo el tiempo en el tiempo... ¿Te unes? ...

Confío...
... Más ¿yo? ¿volver? Regresar no pienso... Soy una mirada que es sólo todo Camino, que es toda ella sólo Vida y que en el presente es Presencia contemplando indivisa Lo Indiviso... avanzando en lo que ES, sin distraerse con lo ilusorio, banal e impermanente... Sí, confío totalmente, por eso ¿yo? ¿volver? Regresar no pienso... Y la sed del alma nunca más. Y la cárcel de la forma/tiempo en espacio abierto se evidencia. Y la existencia toda en ámbito inefable se transforma... Al fin, lo sin principio de nuevo -como antes de todo antes- se manifiesta junto al alborozo de saber que ahora es siempre, sin distancias ni minuteros, sin juicios, teorías o comparaciones... Y ahora, sí, siempre Soy, Eres, Somos, sin medida, sin fisuras, infinitos, libres y sin retorno... en Plenitud. 

KHAAM-EL



Caminar sabiendo que lo dejado atrás no ha de volver
devuelve a la consciencia presente 
que del egoico ensueño del tiempo nos despierta.