sábado, 21 de agosto de 2021

LA MUERTE NO EXISTE


    Os comparto una vivencia real y constatable que tuve con mi hermano tras su partida de este mundo. No nos apeguemos a lo mundano. Estamos de paso. Soltemos el pesado lastre de prejuicios, resentimientos pasados o de expectativas futuras. Pidamos ayuda al Cielo y no al mundo; aquél no falla, éste último sí. Ocupémonos, por tanto, del presente con presencia consciente, con autenticidad y coraje, con verdadera empatía y fraternidad. Lo demás está de más:

    "La noche siguiente a su fallecimiento sentí, en un duermevela consciente, la sensación de angustia de los últimos momentos de mi hermano José Manuel en este mundo y cómo, de repente, para su/mí maravilla, todo se volvía luminoso, envolviendo de dorada paz esa angustia, trayéndole/me una dicha y una plenitud que revelaba una vida inmensa allende esta temporal y corpórea... Al poco, noté como todo regresaba hacia la normalidad perceptiva, cuando oí como me decía: -'hermano no me olvides, pide...' y, de pronto, percibí unas interferencias en mi propia mente que no me dejaron escuchar la última palabra. Mas del fondo de mi conciencia emergió escrita con potente luminosidad la palabra 'CONSEJO' (similar al 14 que le adiviné telepáticamente en nuestra adolescencia) y me desperté sumamente agradecido y en paz.
    La tarde siguiente (1/11/2019) a este sueño lúcido, compartí esto dando un paseo por los alrededores del tanatorio con mi mujer, nuestra amiga Jan y nuestro también amigo Ferran, al que hacía tiempo que no veíamos. Cuando dimos por terminado el paseo y convenimos regresar al tanatorio después de haber compartido, además de este relato reseñado, otros recuerdos varios de José Manuel, decidimos hacernos una foto. Y cuál no sería nuestra sorpresa cuando en la fotografía, seguramente un efecto óptico, pero -nuevamente- una 'causalidad' más que añadir, salimos los cuatro envueltos en una luz dorada exactamente igual a la que había visto en el duermevela que les acababa de describir, y con la misma tonalidad y brillo."
KHAAM-EL - 'Un Camino a la Luz' (pág. 126) - (Junto a este escrito publico la foto indicada en el texto).

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