DIOS Y NADA MÁS QUE DIOS

   Más allá de las probabilidades, en el meollo de la vida, en la sutileza de lo ciertamente espiritual, lo improbable se manifiesta en un instante intemporal que abarca todos los tiempos y sus variables características. ¡Aleluya! El milagro más grande, el que está operando sin cesar para quien está ya cansado de la vanidad egoica, nos regala la gracia de saber cómo nada hay más natural en este mundo antinatural que los milagros... trayendo claridad, paz, dicha y comunión esencial o Amor universal.

    La vida en este mundo es camino. Transítalo, pues, con humilde paso, con alegre ánimo, con fraterna disposición. No hay destino que alcanzar ni logro especial del que alardear. El destino se encuentra en el presente, desplegándose simunltáneamente entre nosotros y con nosotros y por nosotros. DIOS ES; y está aquí y ahora siempre instruyéndonos -si atendemos silenciosamente al hondón del alma-, guiándonos, alentándonos y consolándonos dentro de nuestros corazones.

    ÉL es el Camino de los caminos, recórrelo sin rechazar la cruz y, en el perdón sincero, toda la luz.

    ÉL es la Verdad que desbarata todas las mentiras, permítele que sea tu palabra, tu pensamiento y acción.

    ÉL es la Vida, vívela con autenticidad, sin miedo y lleno de compasión, y obtendrás la plenitud eterna del Espíritu. Pues, la muerte nada puede con el alma llena de DIOS.

KHAAM-EL