A continuación de estos párrafos adjunto el audio de una charla en la que profundizo en la cualidad de lo esencial para descubrir, en lo sutil, que las cantidades son una distracción a la sencillez de la plenitud presente.
Cuando uno busca ser espiritual, sencillamente está buscando su ser. Por eso, si te quieres relacionar de manera espiritual con tu prójimo has de relacionarte con su ser, de ser a ser (el namasté sincero) y no con las apariencias que asoman en lo personal.
Cuando uno busca ser espiritual, sencillamente está buscando su ser. Por eso, si te quieres relacionar de manera espiritual con tu prójimo has de relacionarte con su ser, de ser a ser (el namasté sincero) y no con las apariencias que asoman en lo personal.
Lo espiritual es una cualidad esencial inherente a todo lo viviente, que nada tiene que ver con diferencias ni cantidades. Es un flujo inseparable de Amor, una bendición compartida, un canto de plenitud, una claridad que disipa tinieblas e ilusiones. Y todos la tienen en abundancia inacabable.
Para poder vivir conscientemente en esa cualidad esencial del espíritu, tan sólo hay que dejar de buscar desde lo egoico, detener el ansia de lo especial y su frenesí acumulativo. Nada más, porque desprenderse de lo superfluo nos establece en lo esencial, puro y santo, en lo feliz y pleno, en lo sencillo y amoroso. Namasté.
KHAAM-EL
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