Andar por andar es una pulsión que conduce a ninguna parte, dejando finalmente en el mismo punto de inquietud (atravesar el norte, retorna al sur). De igual modo, pensar por pensar es un impulso que nada claro ofrece, perpetuando al final la misma ignorancia (girar y girar entorno a una rotonda, estanca en esa misma rotonda).
Aquietar la pulsión y sosegar el pensamiento, ausentándoles la atención y retirándoles el personal significado, revela una paz allende cualquiera humana comprensión, que conduce al hondo y no enjuiciador saber que a la ilusión de existir aparte, en un objetivable e implacable tiempo/forma donde un especial 'yo' nace, crece, declina y muere (ego), por completo diluye... Despertándonos a la Realidad Eterna de Ser en Plenitud la Vida de vidas que no tiene principio ni final (Amor): todos y todo Uno con/en/para y por DIOS VIVO-.
KHAAM-EL
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