Quédate en la dicha de ser responsable de la paz de tu mente. Aunque la tormenta incendie el cielo con furia e inunde la tierra con una cortina de lágrimas, hay una profunda serenidad que ilumina la oscura noche agitada del alma, justo en cuanto se decide en favor de la Verdad por encima de todo, justo en cuanto se pone el Amor, sean cuales fueren las circunstancias, sobre cualquier actitud interesada...
Contempla esa Luz que de lo hondo surge y que no
conoce tinieblas... irrádiala… extiéndela… compártela... Conocerás la espiritual comunión del verdadero Cielo, sabrás de la no
dualidad de la existencia, atestiguarás la imposibilidad de la inexistencia, darás testimonio de ello y serás
libre, aun en la prisión de la carne. El miedo no prevalecerá en ti y la muerte
habrá sido completamente derrotada al apoyarte en el Espíritu y no el mundo…. samsara
diluyéndose en Nirvana como una nube se deshace quedando todo cielo.
KHAAM-EL
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