ILIMITADA ESPACIOSIDAD DEL ESPÍRITU

   Atiende a la sosegada espaciosidad de la Consciencia; notarás como se acalla el limitador parloteo de la vanidad egoica, pues jamás hay auténtica consciencia en lo separativo, exclusivo y constreñido. Deja de irritarte con lo que irrita no dándole poder, y, de súbito, desaparecerá toda irritación, porque las estridentes voces del mundo no se silencian enfrentándose a ellas, sino desatendiéndolas en nuestra mente no confiriéndoles significado.

    Sé firme en tu determinación por lo Inefable y manso en tu seguimiento de la paz de DIOS... permanece ecuánime y fraterno, bendiciendo inclusive a quien te maldice, y todo será Bendición, Plenitud y Claridad. No te preocupes, temas o titubees, la Consciencia Pura que en lo hondo palpita trasciende todos los conceptos y juicios, todas las suposiciones y especulaciones, iluminando cualquier tenebroso recoveco que la mente oculte... es Voz plena, trasparente y directa... nada esconde ni disimula en la inocencia esencial de Ser (Espíritu) allende todo lo que parecía ser y no era (cuerpo).

    No busquemos afuera lo que siempre estuvo dentro, muy dentro, haciéndonos uno. No resistamos, por tanto, el flujo natural de lo insondable que a todo lo perceptible contiene. El fin del ego no es muerte, es vida, vida eterna y bienaventurada; puesto que su fin no es sino retorno consciente a la íntima infinitud del SER.

    Distendamos cualquier tensión no tensionando contra ella, abandonando simplemente los egoicos postulados que le daban señera importancia, sustituyéndolos por el Amor y la Verdad, por DIOS VIVO y la ilimitada espaciosidad del Espíritu. Y más allá de lo aparente (aun percibiendo lo aparente), lo real, puro e imperecedero alboreará en un Corazón aquí y ahora, de nuevo, en paz.

KHAAM-EL