Ha de buscarse siempre la luz en el foco de su origen, nunca en lo por ella perfilado, o, una y otra vez, en cíclico suceder, vivirá uno tanteando entre las sombras... Ir tras lo Divino en el reflejo de las propias expectativas extravía en ellas y aleja de la Divinidad, porque todo apego personal resiente la comunión de Espíritu... Fluyamos, pues, en el presente, confiados y en paz, DIOS siempre sorprende para bien incluso en la peor de las tesituras.
No batallemos más contra nosotros mismos fabricando unos yoes en recelosa y externa lid que nunca somos, ni desperdiciemos el aquí y ahora por un futuro ensoñado que, aun cumpliéndose, será finalmente también pasado. Perseveremos con fe en el presente. Ayer no es hoy; mañana, tampoco. Seamos presencia de corazón humilde, conciencia compasiva y fraterna, e incluiremos a todas las almas en la nuestra. Sabiéndonos, así, por la luz de la gracia, incluidos en el Infinito Amor de DIOS.
Por eso, desechemos con vehemente determinación el lujo de querer imperar sobre los demás (pecado), y terminaremos con la carnal miseria de morir por un apenas de egoica corona, resucitando con Cristo (perdón infinito) a la Vida Plena y Eterna en comunión de Espíritu y Bendición.
KHAAM-EL
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