viernes, 26 de abril de 2024

PAZ EN EL CORAZÓN, PAZ FRATERNA, PAZ DE DIOS

    No les temamos a las guerras y rencillas del mundo, ni persigamos esos señuelos de apariencia gustosa que ofrece y que finalmente zahieren el ánimo, quitan la alegría del alma y separan al prójimo del prójimo, trayendo inmenso dolor, confuso resentimiento y muerte. Mantengámonos firmes en el presente no rehuyendo los embates de la vida; lo pasado (por rememorado) pasado está, y lo futuro (por hipotético) nunca se vive aquí y ahora. Despertemos, y vivamos en Espíritu y Verdad. Seamos totalmente conscientes del deseo/miedo con que el ego quiere tentarnos, con que lo diabólico pretende aherrojarnos; desechémoslo, resquebrajémoslo, y ya estamos en la meta, ya estamos en la paz y la dicha que en lo profundo todos anhelamos.
    Tengamos, pues, la valentía de no plegarnos ante las mentiras e hipocresías que encadenan y enfrentan en nombre de un separativo bien (y que por eso es un mal) y de una egoísta libertad (que por eso es tiránica vejación). Ofrezcámosle, sinceramente, a la paloma de la paz un cobijo en nuestro corazón; acojámosla en nuestros hogares, en nuestra cotidianeidad, en lo extraordinario y ante lo adverso, e incluso hostil. Nada podrá contra nosotros, porque nos sabremos Uno con DIOS VIVO y con toda Su Creación... Uno eternamente en comunión... Amor, Bendición y Plenitud.

KHAAM-EL


No hay comentarios:

Publicar un comentario