SERVIR CON AMOR AL PRÓJIMO NOS INCLUYE EN EL AMOR DADO

   Las medias tintas no tienen cabida en lo pleno. Nada hay que conseguir en particular ni tampoco tenemos nada que demostrar a nadie, ni siquiera a nosotros mismos como alguienes supuestamente separados del resto de lo viviente. Todo lo manifiesto en su Esencia es inseparable de lo percibido como tal. Mas, percibir en ningún caso tiene relación directa con ser; y ser, directamente, trasciende cualquier aspecto limitante de sí. La genuina actitud religiosa queda, con esta sencilla comprensión, bien patente. No hay, pues, opción realmente satisfactoria a la satisfactoria sencillez de lo obvio: todos somos Uno en DIOS. Por eso, confiar en el presente por el presente mismo y no secundar la sistemática desconfianza del juicio egoico, que se elonga en el tiempo intentando manifestar figuraciones de seudofelicidades ligadas a determinados aspectos formales, conlleva la innata alegría de sabernos bendecidos según bendecimos a la vida sin cesar, justamente ahora, precisamente aquí... Así que, servirse a uno por encima de los demás es malvivir en febriles e inalcanzables espejismos, mientras que servir a DIOS, a la Esencia que nos une allende todas las diferencias perceptivas, es servir a todos... Y, servir a todos, nos incluye a ti y a mí.

   No nos quedemos, por tanto, en la oscuridad del egoísmo, que va dando tumbos en el tiempo buscando no sabe bien qué, atesorando bienes que por su impermanencia no son tales; y vivamos felices, ahora, en paz, siempre... disfrutando de la bienaventurada Luz del Amor aquí... en este entorno que pasará, pero del que perdurará todo el Amor compartido, convivido, concelebrado... el mundo se convierte así en antesala del Cielo, en puerta abierta de par en par a lo Infinito, en templo de lo Sagrado, porque ya no estamos, ni por un instante más, apegados a él ni a sus huecos asuntos. ¡Bendiciones, amig@! Al fin hemos recordado que Amar a DIOS es servir con Amor al prójimo y que servir con Amor al prójimo nos incluye a nosotros en ese Amor dado... He ahí la clave de la salvación conjunta, ¿cómo no?

KHAAM-EL

Sí, sin duda,
servir con Amor al prójimo
nos incluye en el Amor dado
porque DIOS es Amor.