'DESDE DONDE' SE ACTÚA ES LO ESENCIAL

   Lo aparente no siempre concuerda con lo esencial mientras que lo esencial siempre es imperecedero sea cual fuere la manera en la que sea expresado. Así que, nunca se encuentra la dicha en las formas sino en el desde donde son éstas utilizadas. Por eso, en última instancia, ser honesto y congruente con el propósito para el bien de todos te incluye en él; pero ¡ojo! buscar únicamente el provecho propio, desde su exclusivismo, te excluye del bien mayor a ti también. Se recoge siempre lo que se cosecha, al igual que se recibe lo que se da. Si plantas espinos no esperes naranjas y si ofreces disimulo y engaño recelarás de lo veraz y auténtico; más si lo que siembras es Amor, su dulce y bendito fruto -en su tiempo exacto y milagroso- cosecharás... Llegando a ti multiplicado... Llenando tu alma de gozo, eternidad y plenitud... Colmando tu vida en un presente reencontrado en toda su inefable esencialidad sagrada.

   No te ciegues mirando lo claro desde lo confuso o te confundirás aún más. Antes que nada, contempla tu confusión y disípala con la claridad, proponiéndote que haya luz en tu conciencia con plena consciencia. Sí, que haya sosiego en tu ánimo con calma, que haya alegría en tu corazón con esperanza, que haya pureza en tu mente con fraterna disposición; para poder, en tal caso, realizar lo que debes y dejar de marchar a la deriva de tus confusos temores y deseos particulares. Comprende y realiza. Desde donde actúa uno en la vida es básico para la consecución de la paz mental y la alegría genuina, o para que éstas sigan siendo esquivas. Se ha de tener muy claro lo esencial para que lo superficial deje de distraernos y de provocarnos angustias y fatigas innecesarias. Fijar el propósito con determinación pone el desde donde se va a actuar de forma natural. Por ejemplo, si el propósito es ligar, el desde donde será seductor; si lo que interesa es el dinero, el desde donde será calculador; si lo pretendido es fama, el desde donde será competitivo; y, así, un largo etcetera. Consecuentemente, si el propósito es la verdad, como señala 'Un Curso de Milagros', no puedes fracasar; pues, el desde donde provendrá de la verdad misma que pondrá los medios para que el resultado sea indiviso en ella, o, lo que es lo mismo, para que la experiencia viva en la verdad te haga libre de todas esas mentiras propias tomadas como verdaderas. 

   Confía. Desde la luz no puede haber sombras en la luz. Así que, déjate sorprender por lo inesperado no proyectando más expectativas que silueteaban sombras de personal incertidumbre. Contempla con inocencia el presente desde una esperanza agradecida, desde un corazón enamorado que se ofrece al Cielo, desde una mente felizmente hermanada, desde un palpitante núcleo viviente lleno de asombro y alegría. ten fe. Sólo se alcanza la libertad estableciendo de antemano no escuchar al miedo ni a sus seductoras estrategias; entonces la voz del Amor, desde su incondicionalidad, guiará tus pasos hasta él. Y en el Amor: Dios... Y en Dios: la comunión de lo santo. Acércate, pues, a Dios (que no es separado de tu esencia ni de la esencia de nadie) con firme propósito y Él te sorprenderá de inmediato con Su Infinita Gracia. Sencillo: Vive en/por/y para Dios, y vivirás desde Él eternamente en plenitud.

KHAAM-EL

No hay palabras, 

ni siquiera expresivas imágenes o sentidas melodías,

 para poder expresar en toda su vivacidad esencial

la plenitud de la vivencia del despertar a la verdad de lo eterno,

al conocimiento de ser tod@s uno en el Amor de Dios.

Tan sólo sugerentes invitaciones al abandono del apego al ego...

Y, de repente ('desde ese abandono'), Lo Inefable.