APRENDER LO ESENCIAL NOS DESCARGA Y LIBERA DEL ENGAÑOSO EGO

    Supina torpeza es no indagar en el origen y propósito de todo lo que se origina. La marea sube y baja, la noche y el día se alternan, las estaciones se suceden y reiteran, la infancia se avejenta, lo saludable y vigoroso enferma, y lo aprendido se olvida en cuanto el intelecto humano se deteriora, porque lo que en el tiempo nace, en el tiempo actúa, declina y finalmente muere... Una absurda fantasmagoría llena a su vez de absurdas identidades, ufanas y cambiantes, en pertinaz pelea por ganar lo que se malogra en semejante 'todo' que se derrumba, es el mundo del ego; siendo, entonces, su 'todo': nada. Mas, no hay efecto sin causa; luego, nada no puede ser ni principio, ni intermedio, ni final, sino únicamente una hueca ilusión de inconsistente apariencia.

    Allende lo originado y desaparecido, al otro lado de todos los lados, previo a nacientes precedentes y ulteriores postrimerías, un ámbito sagrado, inefable e intemporal, aglutina en sí -sin verse en absoluto afectado- cualesquier afectación. Siéndose Ser, sin precisar de continentes que lo contengan, cimientos que lo sostengan o proporciones que lo embellezcan, creando en un puro verterse en plenitud plenificante, regocijándose en una bienaventurada ilimitud ilimitándose más acá y más allá de límites, perfiles, definiciones y formas... DIOS VIVO en mí, en ti, en todos y en todo... ¡Aleluya! ¡Jubilosa liberación de la injusta justicia carnal! Que condenaba al fatigoso yugo de pelear por sostener lo insostenible y a cargar con la pesada carga de la muerte a todo aquel que sólo el cuerpo creía ser.

    Vivenciar y testimoniar cómo cualquier egotización es maligna confusión, aclara el entendimiento, descansa el alma y nos despierta de la engañosa percepción formal/temporal que el egoico pensar fabricaba. Ahora aquello que de cierto somos en Amor, Espíritu y Verdad, en Eterna Comunión de Vida, en indescriptible y definitiva Divina Unicidad, como Cristo nos enseñó, se encarga de 'todo' haciéndonos "la carga ligera y el yugo llevadero".

    KHAAM-EL