Conversión,
arrepentimiento
y humilde enmienda
única salvación verdadera.
El auténtico poder es el Amor.
No habrá impunidad para el mal.
El tiempo sustraído a los inocentes
segando sus vidas por riquezas y poder
será contado hasta la última gota de sangre.
Con creces se resarcirá a la viuda y el huérfano
expoliados por la avaricia hipócrita de falsos piadosos.
Las lágrimas innecesarias provocadas por sus injustos legalismos
anegarán finalmente, como un tsunami, sus vanas autocomplacencias.
Y la pobreza infligida al prójimo para obtener lujos les roerá los tuétanos
como ratas hambrientas, humillando su orgullo, para que corrijan su maldad.
-Un servidor del DIOS VIVO-







