CUANDO EL "¿CUÁNDO?" DEJA DE SER LA EXCUSA...

   Cuando el '¿cuándo?' deja de ser la excusa preferida del buscador espiritual para no cesar con su inacabable buscar, el presente refulge en plenitud sin las vanas distracciones de expectativas venideras. No dándoles significado a la obsesión por lo formal/temporal las ilusiones que lo forjaban se desvanecen dejando a la luz lo esencial y eterno. Contempla al contemplador y los sueños se disiparán, porque sólo se encuentra cuando se mira donde se ha de mirar. Si, de verdad, en tu vida quieres paz y dicha has de mirar en tu interior y dejar de buscarlas afuera, en este mismo instante, aquí y ahora. El futuro no te trae nada que esencialmente no tengas ahora y sólo repite memorias de ansia o temor.

   Nada ni nadie tiene poder sobre tus pensamientos (ni visionarios, ni calendarios, ni milenarismos, ni leyendas, ni siquiera telediarios, politiqueos, famoseos o economías); son únicamente tus propios pensamientos los que les confieren el aparente poder de desestabilizar tu paz y dicha, al dejar que alimenten tu deseo o tu temor, tú curiosidad o dejadez... ahonda en las raíces mismas del acto de pensar... contempla tu propio razonar. Desconfía de tu íntima desconfianza, de tu angustiosa búsqueda de garantías y seguridades, de tus fabulaciones y mitomanías, de tus anhelos y aversiones, de tu fijación por las manecillas del reloj... deja de distraerte con idioteces, permanece presente, y detén con firmeza ese frenético elucubrar, manteniéndote ecuánime y distanciado de tus seductoras ensoñaciones de identificaciones personalistas que campan por tu mente... "el resto vendrá por añadidura".  

   Cuando el '¿cuándo?' deja de ser la excusa nada se interpone entre tú y el ahora... Y, ahora, sólo queda el Ahora en su infinitud.

   El inesperado encuentro con la Eternidad asombra y deja a la mente en completo, sublime, bienaventurado e inocente silencio por Su inconmensurable magnificencia todoabarcadora... Las partes no se comunican con un todo (buscar eso, es no encontrar jamás)... el todo se comunica con todo lo que parece conformarlo instantánea y completamente, porque 'parte' es un mero concepto carente de significado... todos los haces de luz conforman una misma Luz, todas las notas de una Sinfonía son esenciales, e inseparables, de la bella Sinfonía que entonan (buscar ahí, es encuentro interior con la infinitud)... Al fin, ahora, aquí, siempre, tu corazón rebosa en la inacabable pureza del júbilo y la perfecta paz de la plenitud del Ser. 

   Cuando el '¿cuándo?' deja de ser la excusa jamás hubo nada complicado realmente, ni sufrimiento que tuviera ciertamente consistencia... el flujo del ahora, como una bellísima melodía, te une eternamente con la Fuente, te trasporta -en un instante- al Paraíso, a la Eternidad, al esplendente Ahora... lo pasajero, pasó... lo eterno, siempre es... fluye... fluye... fluye feliz, siempre Ahora...

KHAAM-EL

Nuestro hogar, alma pura, 
no es el mundo ni su tiempo devorador... 
es el Cielo que trasciende tiempo y forma
siempre ahora
en la esencia plena de SER.