martes, 26 de mayo de 2020

PERCATACIÓN CONSCIENTE: PLENITUD DEL SER... AMOR

   Atestigua tu percibir y notarás como éste es un límite limitador en su diferenciadora función sensoria. Sigue concienciando la consciencia y ahonda en esta simple percatación. Reconocerás -con liberador asombro- que el yo que piensas ser, y que define al resto de yoes que observa desde sí, es aparente, no real. Más, en la percatación consciente, se evidencia (sin necesidad de definir ni definirse) un Sí Mismo que no está condicionado por la observación, y que es (por así decir) observación pura: un, sencillamente, en Sí que ES SER. Y mientras el mundo perceptivo sólo percibe sus propios límites, los califica, cataloga y explica desde su miope óptica reducida y reductora, considerándolos reales -cuándo estos límites únicamente son un efecto del efecto de lo separativo, que no es causa de separación bajo ninguna circunstancia-, en Lo que ES, en Lo Inseparable, nada de lo percibido tiene consecuencias definitivas, ni sufre merma o pérdida esencial alguna por ser Su Naturaleza Inmutable y Perfectamente Definitiva sin origen ni término (Dios, Absoluto, Nirvana, Cielo, Ser, Absoluto, Tao, Alá..., muchos nombres que indican aquello que trasciende todos los nombres y es, a su vez, inmanente a todos ellos). Luego, con seguridad, el mundo en el que piensa vivir ese yo especial es una proyección de su propia ilusoriedad. ¡Despierta! Ahora, en la observación pura, todo se revela por Sí Mismo en Sí Mismo sin apartes ni despueses que valgan. Por eso, la Brillante Plenitud del Ser no se oscurece jamás aunque en lo ilusorio casi todo sea sombrío y quebradizo. Ve, amig@, en consecuencia, más allá de los juicios derivados de la percepción personal y experimenta lo que trasciende cualquier experiencia egoica, merced a una vivencia libre de condicionamientos y posicionamientos separativos. No te demores, pues, justificando lo injustificable y abandona todo deseo de particular avidez; ya que, es imprescindible prescindir del apego a lo prescindible para constatar lo en verdad imprescindible: la Brillante Plenitud del Ser, El AMOR.

KHAAM-EL



Percátate, amig@, del aliento en el desaliento,
de la consciencia en la inconsciencia,
de lo esencial en lo aparente...
Si aún rodeados de tinieblas deseamos la Luz,
perseguidos por miles de conflictos anhelamos Paz,
aprisionados con reglas y culpas 
aspiramos a la Libertad y el Perdón,
confundidos con mentiras y falacias buscamos la simple Verdad,
sacudidos por la soledad y la desesperación
buscamos fraterna compañía y Amor...,
es porque el AMOR,
la Brillante Plenitud del Ser, existe.



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