A continuación de estas líneas adjunto el audio de una charla en la que ahondo en la fe viva, esa que hace posible que una existencia marcada por el pesar, la enfermedad y el sufrimiento, pueda cambiar a una vida plena. Todos quieren Amor; y es lícito querer ser amado, pero: ¿te quejas o amas? Si te quejas, olvidas amar y, entonces, no puedes ver ni experimentar todo el Amor que ya está ocurriendo. Has de estar muy atento a lo que el presente requiere de ti para compartir Amor y Felicidad genuinas, en lugar de distraerte con historias personales. Mantenerse presente es un acto que, en su constancia, abunda en la fe que -a su vez- trae los milagros correctores de la manera de pensar y actuar equivocada que lo exclusivamente particular repite. Por tanto, permanece fiel en la fe, confiando totalmente en la luz que Dios revela en el presente, mediante la acción desinteresada, incluso rodeado de vicisitudes e insidias, y todo cobrará un nuevo sentido lleno de plenitud y gracia.
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