MIRA CON OJOS LIMPIOS... *

   No escuches el angustioso griterío del resentimiento ni mires su oscuro destello de inútil sugerencia como algo a tener en cuenta. Rompe las cadenas de ese orgullo adquirido con los años que esclaviza con sus falsas promesas de triunfo y honor, de riqueza y confort, de goce y protección. No tengas pasmo de la noche oscura, e intérnate en ella con la esperanza consumada por la fe presente; ahora hay paz, aquí hay Amor, si no deliras con la fiebre del deseo o el temor. Más allá de las cerradas nubes de tus pensamientos está la luz perenne de la consciencia consciente de ser siempre pura Consciencia... Presencia... Esencia... Observa. No duermas imaginando despertares... la mirada no agarra lo que ve; no la enturbies con la codicia del anhelo ni la reseques con la aridez del rechazo. Contémplalo todo desde la paz de tu alma... descubre lo que parecía cubierto. Un río no llora por las tierras dejadas atrás, avanza corriente abajo hacia el anchuroso mar en el que halla descanso a su irrefrenable curso. Desciende sin añoranzas, con mirada limpia, amorosa y feliz, hasta el centro de ti mismo; y encuentra, en lo más hondo y sagrado, ese Cielo atisbado con la intuición del flujo vital que te sustenta...

... Siente al sueño soñar tus sueños.

Contempla las pupilas que te perfilan

en un mundo efímero lleno de contrastes

pretendiendo razones que estallan como pompas de jabón.

Siente al sueño soñar tus ojos

y descubre como tu mirada sueña otros ojos.

Tus pupilas definen lo que estas líneas manchan negro sobre claro.

El significado brota de lo íntimo, de lo esencial e indescriptible;

no de lo externamente delineado.

Siente al alma acunar tus sueños

para que al despertar no los confundas con lo real.

Lo intangible siempre permanece.
El reloj tan sólo acompasó figuras de barro
que nada tienen que ver con la completitud de ser.

Mira con ojos nuevos... 

todo lo viejo, pesado y repetitivo
se desvanecerá como nubes en el cielo 

por el soplo benigno e ingrávido del espíritu.

Siente a las fatigas descansar en la mirada despierta del Amor

que bendice tu pureza intemporal con infinita ternura.

Mira con ojos nuevos...

y contempla a todas las miradas alcanzar el Mismo Cielo

allende el efímero reloj de polvo y muerte.

Siente reverdecer el alma

perfumada por sutiles aromas de eternidad y vida.

Mira con ojos nuevos...

en el jardín de la mirada el ser es sin fronteras

se esparce por un ámbito inasible, y...   con él comulga.

Cualquier aparente marco que presenta el insondable acontecer

es una ventana abierta a lo inconmensurable.

Mira con ojos nuevos...
despierta a lo infinito en lo profundo.

Y, en ese despertar, conoces

que suaves brisas tiznadas de luz

besaron tus ojos inquietos 

mientras fluías corriente abajo...

hacia el centro del Amor...

hacia el centro de la Alegría...

hacia el centro de Dios.

¡Hacia la Bendita Plenitud!

KHAAM-EL

Pon tu mirada sólo en la Luz, 
dejando que la música acaricie dulcemente tu alma 
y desencadene un flujo de bendición incesante... 
desde la renovada esperanza de tu alma 
hasta el Amor puro e inmortal.