domingo, 3 de abril de 2016

DALE LA BIENVENIDA A DIOS +

   El mundo tal como lo percibes a cada momento, desde los sentidos personal/corporales, es una recurrente despedida. Todo te está diciendo hola y adiós de una vez, con insolente displicencia... rompiéndote el corazón con su vaivén; pero tú, con fe, sigue enamorado, libre de irreflexivos hábitos condicionados, libre de la seducción de los deseos o de las expectativas, libre de angustias e insensatos temores por mantener lo inmantenible; siendo soberano de la paz de espíritu siempre aquí y ahora... contemplando, sosegado, atento, la contemplación de un supuesto contemplador. Lo Que Es es sustancial en/a todos y todo... en la esencia encuentras lo infinito... Eres. nada más, nada menos, eso que ni añade ni mengua. Simple, sencillamente eres... Ser. 

   Que este instante sea todos los instantes y este día toda la vida. Ser feliz nunca es para después. No te pelees con Eternamente Lo Que Es; el que combate, pierde. Lo que percibes al momento es lo último, no te agarres a ello o te sentirás morir. Eres, ahora. Despréndete del pasado, sin titubeos; no especules por un futuro que no es más que un sueño. Eres, aquí. Acepta lo sustancial; y lugares y circunstancias dejarán de distraerte. No retrases lo inevitable; y vive completamente, sin cálculos... a corazón entregado, a alma descarnada, a mente abierta y despreocupada. ¡Vive! Siendo puro presente. Compartiendo lo sutil y santo, lo eterno y bienaventurado. Despídete de los saludos efímeros que sólo traen despedidas y, con paciencia esperanzada, mantente en paz, en la acción 'no apegada' y pura de un presente totalmente entregado a la Voluntad de Dios. Permite que tu alma reciba Su Abrazo infinito siendo fiel a Su mandato de Amor. Desconfía de la desconfianza de lo personal e invita a tu prójimo a lo eterno y santo, viviendo sin miedo, compartiendo con generosidad, encaminándote a lo esencial. Clama y proclama -henchido de júbilo- la gracia del Amor... "En todo venceremos de sobra gracias a Aquel que nos ha amado." Romanos, 8, 37. Sí, Dios es Amor y nos envía la salvación a cada instante mediante Su Santo Espíritu. Escúchalo sólo a Él, dejando ir aquello que muda y pasa. Sobre todo y ante todo Dios (Lo Que Eternamente Es). Confía, que nada te turbe, nada te espante. Confía, todas las cosas, todas las relaciones, conducen hasta Él, si no te las apropias. Da, date, comparte... Y, feliz, dale la bienvenida a Dios, que Es para siempre.

   Lo eterno basta; en consecuencia, lo temporal sobra.

   No te atormentes por pasajeras tormentas y todo tormento terminará. No te ilusiones por pasajeros placeres y todo dolor cesará. No te agarres a relaciones efímeras vestidas de carne y el Amor volverá a ti en la luz eterna del espíritu. Permanece jubiloso, agradecido y en paz... Y ahora, aquí... Dios.

KHAAM-EL





Dale la bienvenida a Dios y regresa a la plenitud de Ser por siempre en Él.
En Dios todos somos un único y eterno canto de Amor y Vida.
Únete al  'coro todoabarcador'  del espíritu
y sé feliz invitando a tu prójimo a compartir la dicha infinita de alabar a Dios en/con semejante canto santo nacido de lo más puro del alma.

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