No retengas nunca una expresión de Amor... y toda la Gracia te colmará de bendiciones.
Un abrazo. Un saludo.
Bendiciones. Gracias. Todo va bien cuando hay Amor... lo pasajero nos devolvió
a lo eterno. Abre los ojos del alma y contempla la vida con
gratitud... las vicisitudes abonaron la fe para que crezca el milagro
de la plenitud.
Agradece todos tus
días... los caminos y sucesos, por variopintos que sean, conducen todos a
una misma realidad bendita e indivisa. Cada día una oportunidad para abandonar
el miedo y Amar; cada risa un regalo que compartir; cada llanto un impulso
hacia la compasión; cada irritación un recordatorio a la paz; cada duda un
acicate por la verdad; cada revés de la fortuna un guiño a la humildad; cada
afrenta una puerta de perdón; cada deseo facilita un soltar; cada enfermedad
posibilita una decisión en favor del espíritu; cada muerte trae una
resurrección. No hay carne que limite al espíritu eterno que en esencia somos
ni tiempo que lo sepulte.
Aplica la confianza plena y
dale las gracias a la vida por todo. No la planifiques ni le reproches. No busques
compañía por necesidad o soledad y ámate como Dios nos Ama. No te castigues ni
lastimes con vacilaciones recurrentes. Las contradicciones en nombre del Amor
sólo son demora. No hay soledad en el Amor ni en la comunión de lo vivo. En lo
interior encuentras lo infinito. Descubre lo insospechado en un instante santo, abandonando por completo las
sospechas y las desconfianzas. Pensar en la vida no es realmente vivir. ¡Vive! ¡Sí!
¡Vive con todo tu corazón entregado! ¡No temas! ¡Sé feliz aquí! ¡Vive en paz
ahora! Respira la ilimitud del presente y confía en la Luz que refulge en ti. El
cuerpo es, tan sólo, una herramienta para despertar, de nuevo, a nuestro
verdadero ser en el Santo Espíritu de Dios, y volver, por la Gracia, al Hogar Eterno
de Su Amor Perfecto.
Como san Francisco de Asís, pide ser un instrumento de Paz y Amor, de Fe
y Alegría, de Consuelo y Verdad, de Canto lleno de Esperanza y Perdón, de
Visión y Claridad; y estar dispuesto a escuchar, reconfortar y Amar, por encima
de los propios intereses. El resto, se recibe milagrosamente para el bien de
todos cual uno solo, porque todo lo que se da se mantiene. Vive en el perdón y
muere por Amor para vivir de verdad allende este mundo efímero.
Gracias. Bendiciones. Un saludo. Un abrazo. Eres libre cuando sirves al
Amor de Dios con devoción y fidelidad inquebrantables. ¡La Paz sea contigo hermano
del alma!
KHAAM-EL
Haz lo que debes y vive feliz de ser Hijo de Dios.
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