ÁBRETE A LO INSOSPECHADO * *

   El karma, en su ciega acción, no sabe de la luz de la Gracia. Samsara intenta ocultar Nirvana. El mundo se separa del Cielo. El ego quiere que creas que él eres tú.

  La Gracia deshizo todo karma de igual manera que donde hay luz no es posible la oscuridad. Medita... Despierta... Nirvana ya es en samsara si no te ciegas con acciones personales que giran y giran sin sentido... ¡Sí! Despierta... puedes estar en el mundo sin ser del mundo. El ego realmente no existe.

   Toda aparente disparidad y su problemática, en todo momento y circunstancia, han estado resueltas en la unicidad. El Amor no conoce el miedo. No sabe de karmas, ciclos, sufrimientos y personalidades. El Amor conoce la plenitud de Ser lo que Es. El Amor te salva de tu sueño de dolor siempre ahora. Sólo Dios y Su perfección tienen en verdad significado. Bajo Su luz no hay pesar ni muerte posibles. Todo es uno y amen.

  Vuela por encima de tus pequeñas y angustiosas premisas. Por favor, no te circunscribas a tus rutinarias y retroalimentadas memorias. No te protejas desde un ayer para alcanzar un mañana que te sustrae el hoy. Confía de verdad, aunque sólo sea por un instante... y, de repente, la Luz... entonces, ya nada, a Dios gracias, volverá a ser como antes. 

  Ábrete a lo insospechado e inimaginable. No des nada por supuesto, incluido tú mismo, y algo que no es algo se hará evidentemente claro, gozoso y rotundo en tu conciencia... para que se disuelva el 'tú' y únicamente quede conciencia ilimitada: sat, chit, ananda... ser pura conciencia bienaventurada.

   Confía... lo insospechado te trae bendiciones ilimitadas.... un Despertar de despertares... una Luz sin sombras... una Amplitud de amplitudes que te libera de las inútiles, férreas y dolorosas ataduras del tiempo y el espacio. No hay rueda de samsara que pueda hacerte girar y girar contemplada desde lo alto, ni acciones que te encadenen si no buscas un beneficio particular de ellas. No hay mundo que te limite desde el cielo, ni careta que pueda en última instancia satisfacerte.

   Sé tú mismo en esencia y no quieras resolver lo perceptivo... quédate en paz...confía. Y tu sencilla e inocente apertura al instante presente, y a la gracia que por éste mana, te trae bendiciones insospechadas; como si de un manantial inagotable de milagros y sincronicidades, que te conducen al Cielo y Su luz infinita, se tratase.

KHAAM-EL

Déjate sorprender por la luz.