Deja de estar distraído, eres el presente en toda su amplitud ilimitada, por tanto:
No estés distraído con las distancias, eres el aquí.
No estés distraído con el tiempo, eres el ahora.
No estés distraído con lo que va y viene, eres la eternidad presente.
No estés distraído con lo que se resquebraja o perece, eres la vida.
No estés distraído con las quejas, eres la incesante alegría de ser.
No estés distraído con preocupaciones de posibles éxitos o fracasos, eres la paz de espíritu.
No estés distraído queriendo anticipar futuros o desenmarañar entuertos pretéritos, cada instante que con consciencia vives tiene su propio afán inseparable de toda la luz,
Deja de estar distraído, eres la plenitud. No te distraigas fraccionándola en relaciones particulares, mediante las que te arrogas la creencia de saber lo que te conviene buscando unas y evitando otras. acéptalas todas cual una sola relación y la paciencia infinita abrirá tu corazón a la compasión y el Amor.
Eres lo que Es, no te distraigas pues con un impertinente llegar a ser que nunca es.
Yo Soy es la maestría, porque Yo Soy no es nunca el cuerpo ni una identidad personal... es Luz sin sombras, perenne llama ardiente de vida plena, eterno flujo bienaventurado de irrefrenable bendición, sencilla y humilde puerta al Cielo. Por eso Yo Soy no es las palabras, ni las imágenes, ni las formas, ni un discurso, ni una posibilidad siquiera; sino que las palabras, las imágenes, las formas, los discursos y cualquier imaginaria posibilidad son utilizadas por Ello, para acabar con las palabras, las imágenes, las formas, los discursos y las posibilidades, con Su infatigable consciencia presente que destruye sin violencia ni esfuerzo al ego, mediante el completo perdón de lo transitorio y separativo, incluyendo, disolviendo dulcemente, abrazando, cortando todos los cables relacionales que fabricaban una complejidad perceptiva y de juicio que parecía tener un significado deseable, cuando, en lo sustancial, cualquier relación tempóreo/formal de perceptivas situaciones variables y de inconcluso devenir (la relación especial del ego), no tiene, ni podrá tener jamás, un significado real o verdadero.
Deja que lo que Es sea. No te distraigas y permanece en Yo Soy el que Soy, en la Luz de ser uno en/con la Divina Unicidad... mantente en la mente meditativa, sosegada y en paz; sé oración constante, una honesta plegaria entregada con devoción, porque "la oración es el vehículo de los milagros. Es el medio de comunicación entre lo creado y el Creador. Por medio de la oración se recibe amor, y por medio de los milagros se expresa amor." (UCDM). Ama y perdona. Sé en/con lo real y desimagina todos los mundos que fabricas. Deja que la felicidad presente diluya la angustia de creerla en un tiempo esquivo. Permanece en el espíritu, no te distraigas con la transitoriedad corporal. Abre tu mente a lo universal. Confía, camina en la Luz y mira desde ella, contempla agradecido como te conduce a la salvación. No estés distraído y experimenta el milagro de despertar de un sueño que tomaste por la realidad. No estés distraído soñando despertares, y despierta siendo consciente de que esta vida (la del mundo y su trasiego) es sueño. No te pelees con tú prójimo al estar en conflicto contigo mismo. Mantente atento a lo que el ahora realmente requiere, y deja que la fraternidad y la confianza mutuas (los unos con los unos) traigan ese esplendente despertar a la Verdad y el Amor. No temas. La confianza a de partir -primeramente- desde tu corazón al de todos. Dale, por tanto, tu corazón a Dios... deja que lo que Es sea.
KHAAM-EL
Ten fe en la guía presente de Dios, que se muestra con clara Luz a todo aquel que deja que lo que Es sea. Ponte a disposición de Su Gracia. Sé oración agradecida y dispuesta, mente en paz y corazón agradecido, Yo Soy el que Soy nos guarda en Él, en unicidad y Vida eternas. No hay tiniebla que no disipe en un instante. Confía y estate presente, para escuchar Su certera Voz trayéndotejunto con tu prójimo a tu Santo Hogar en Él.
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