NO BUSQUES REALZAR TU IMAGEN Y VIVIRÁS PLENO *

   No hagas nada por resaltar tu imagen. No busques realzarla o, insensatamente, te reducirás a ella, a una minúscula grandilocuencia. Favorecer una imagen fabrica meras imaginaciones y fantasías que elaboran una parodia de ti mismo, un espejismo de fabulosa estupidez personal, intentando vanamente relucir sobre el común. No seas, amigo/a, iluso ni fantasioso, hazlo todo, absolutamente todo -aunque en un principio te parezca costoso-, por el bien mayor, sin importar si puede deteriorar la imagen propia. Es decir, nunca actúes motivado por objetivos de especial provecho particular con los que ignorar la sencillez de lo universal. de lo santo e inmortal; y. el siempre peleón ego, disimulado de buenismo a veces y desenmascaradamente arrogante otras, desaparecerá, porque hacer lo correcto, evidentemente, nunca ataca, más tampoco complace los sueños de otro ni se acomoda en ellos, sino que invita siempre a despertar de su sugerente y a la vez trágico reclamo. Ir de superhéroe, o necesitarlo, es una ilusión que fabrica malvados para perpetuar semejante historieta de absurda complicación. Aquiétate. No le des crédito a la inercia de pensamiento. Reflexiona. Jamás puede haber paz en los sueños por dulces que pretendas que sean. ¡Es imposible! Comprende que compartir sueños es compartir nada, puesto que los sueños de uno siempre terminan por chocar contra los de otro. No guerrees aparentando pacifismo, o en tu interior no dejarás de batallar y sufrir aunque en lo exterior lo enmascares con relativo éxito. Lo que das te lo das a ti mismo, lo que quitas te lo quitas a ti mismo y lo que aparentas te falsea tan sólo a ti. Sé veraz, pues, y no juegues más el juego de las apariencias. Párate y medita... sólo en la quietud interna, desembarazada de deseos y temores, alborea la verdad que nos hace libres. 

   Nunca te desanimes por los obstáculos del humano vivir, permanece en el espíritu, en la consciencia presente, y, todos ellos, serán disueltos en la paz mental, sin necesidad de mágicos poderes, o de titánicos y agotadores esfuerzos. Mantente sereno. Confía. Haz lo que debes instante a instante, momento a momento, y las dudas cesarán de asaltarte, y el agobio parará de angustiarte, y el miedo dejará de atenazarte, y la culpa concluirá de atormentarte, y el ansia se desvanecerá en la bendición del júbilo interior... en la bienaventuranza de la presencia de Dios en tu vivir. El tiempo rezumará eternidad y el espacio destilará santidad, porque ahora las formas se perfilan sombras al transparentarse en la luz del Espíritu. Se vislumbra el amanecer de la verdadera dicha en el declinar de la pesadumbre. No le prestes atención a los tenebrosos pensamientos de fragilidad, enfermedad y muerte; contempla únicamente aquellos pensamientos que expresan y comparten felicidad, consciencia plena, paz mental e iluminación... la claridad del presente perdonado de todo juicio, expectativa o limitación perceptiva, resplandece en el Amor infinito de Ser uno en/con Dios... Felices aquéllos que no quieren sostener una imagen propia ante los demás, pues ellos son la luz del mundo y vivirán plenos. Y benditos aquéllos que irradian, sin vergüenza ni temor, la luz pura que mora en su interior, porque ciertamente ellos regresan, aún en medio de indiferencias y desprecios, al Paraíso. 

KHAAM-EL

Sé uno en/con el Eterno... 
luz en la Luz que refulge noche y día 
allende toda forma e imagen. 
Sé para siempre Dicha... 
Sé para siempre Vida.