1.
Todo lo del tiempo tiene su tiempo; pues, todo lo formal/separado tiene un comienzo, un desarrollo y un término. Una sombra de la lo que Es, un relejo soñándose en un espejo, un sin significado intentando significarse, una nada pareciendo algo: un ego.
2.
Como señala 'Un Curso de Milagros' en la lección nº 24, desde el ego, realmente, nadie percibe lo que más le conviene. Pues, éste quiere aferrarse a lo que le agrada y desechar lo que le desagrada desde una perspectiva reducida y reductora.
3.
Ver más allá del ego, lo deshace. No apegarse al ego, abre la Visión del significado perenne de DIOS VIVO y la comunión espiritual con ÉL de toda Su Creación.
4.
El ego, al carecer de significado y en esencia ser nada pretendiendo algo, no sabe cual es el propósito de nada, como nos aclara la lección nº 25 de 'Un Curso de Milagros'; mientras que el Espíritu, lo real y eterno, el pleno e indefectible significado, sabe que en esencia y en verdad todo tiene un hondo significado que conduce, a quien está cansado de las ambigüedades y contradicciones del mundo, al desapego del ego y sus vanos razonamientos.
5.
Los cuerpos, en su limitación formal temporal egoica, se encaminan opacamente hacia la muerte; el Espíritu que en ellos mora, por Su Luz Viviente y Pura, no.
6.
Aquello que es antes del tiempo y la forma, la Verdad, es el Espíritu de DIOS VIVO que crea y extiende Vida a Su Imagen y Semejanza: Eterna, Plena, Sabia, Amorosa y Bienaventurada... Pura Luz Sagrada.
KHAAM-EL
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